La Nácara: Un tesoro gastronómico efímero que deleita paladares en Minatitlán
La nácara, un manjar estacional que deleita paladares solo unos meses al año. Descubre por qué este pequeño pez es tan apreciado en Minatitlán, Veracruz.
En las profundidades del río Coatzacoalcos , en el corazón del sureste mexicano, habita un pequeño pero poderoso protagonista de la gastronomía veracruzana: la nácara. Este pez, que no supera los 15 centímetros, se ha convertido en un símbolo de la riqueza natural y culinaria del municipio de Minatitlán.
Con la llegada de las lluvias, la nácara inicia su migración hacia las zonas inundadas para desovar, un evento que marca el calendario gastronómico de la región. Durante esta época, los ríos de Veracruz y Tabasco se llenan de vida, y los pescadores locales esperan ansiosos la llegada de este codiciado pez.
La temporada de la nácara
Cuando llega la época de la nácara, “alborota al robalo, el chocomel”, comenta Santiago Márquez Clemente, un experto pescador. En Tabasco, también la llaman “topen”, pero, en Minatitlán, la conocen como “nácara”.
La nácara es un manjar muy apreciado por su sabor delicado y su versatilidad en la cocina. Se puede preparar de diversas maneras: en caldo, empanizado o envuelto en hoja de acuyo. Sin embargo, doña Reina, minatitleca que se dedica a vender este pescado como platillo, tiene una receta favorita: Frita, con tomate, cebolla, limón y cilantro. ¡Así es como se debe disfrutar!
Nada dura para siempre y la nácara no es la excepción
La temporada de la nácara es efímera, y los habitantes de Minatitlán aprovechan al máximo estos pocos meses para degustar este manjar. Lo bueno nunca dura para siempre, dicen por ahí. Los amantes de la nácara tendrán que esperar hasta el próximo año para volver a saborear este tesoro de los ríos y a su vez, quienes ya lo han degustado, invitan a los visitantes de Minatitlán a probar este delicioso alimento.
La nácara es mucho más que un simple pescado; es parte de la identidad cultural de Minatitlán. Su captura y consumo son tradiciones que se transmiten de generación en generación, fortaleciendo los lazos entre la comunidad y su entorno natural.
