Permítanme abrir diciéndole que en abril del 2024 nadie puede afirmar que Robert F. Kennedy Jr.; hoy candidato independiente a la presidencia de Estados Unidos será elegido presidente en noviembre del 2024.
Lo que sí se puede decir con certeza es que hoy, en Abril del 2024, está claro que cada voto a favor de este candidato será un voto que ayudará o perjudicará a Donald Trump o a Joe Biden.
RFK Jr. es hijo del legendario Bobby Kennedy, y por lo tanto sobrino del presidente John Kennedy y del gran senador demócrata Teddy Kennedy.
Por eso a los demócratas les viene preocupando tanto la candidatura independiente de este Kennedy, desde que abandonó las primarias demócratas y se postuló de forma independiente. Creen que esta candidatura de Kennedy le robaría votos demócratas a Biden y eso favorecería a Trump.
Lo curioso es que los republicanos también desde principios de este año, creen lo mismo. Por eso dicen que existe el peligro de que muchos desencantados con Trump, vean a RFK Jr. como alternativa y voten por él, lo cual favorecería a Biden.
Vamos por partes
Los Kennedy siempre han sido demócratas, y aun así el heredero con el nombre más ilustre de la segunda generación decidió que los valores demócratas no son los suyos.
Aquí, estoy seguro usted está preguntando ¿Por qué no?
La respuesta nos la dio el propio RFK Jr. en el lanzamiento de su candidatura el 9 de octubre en Filadelfia, en el muy disputado estado de Pensilvania. Ahí Kennedy les dijo a sus seguidores, que para él era “muy doloroso” romper con el partido de su dinastía política familiar, pero que los estadounidenses merecían una alternativa mejor que solo el sistema bipartidista de siempre.
Y Kennedy, metió el estoque hasta la empuñadura agregando: “Tres cuartas partes de los estadounidenses creen que el presidente Biden es demasiado mayor para gobernar eficazmente”.
Y para no pecar de parcial dijo, además: “El presidente Trump enfrenta juicios tanto civiles como penales. “Ambos tienen índices de favorabilidad que se encuentran profundamente en territorio negativo. Eso es lo que nos ha dado la política bipartidista de Estados Unidos”.
Lo que Kennedy no dijo es que históricamente los candidatos externos en elecciones presidenciales estadounidenses nunca han podido reunir el apoyo necesario para enfrentarse a los partidos establecidos…Y nunca han ganado.
En noviembre podría haber un empate tan cerrado entre Trump y Biden que quienquiera que le robe votos a alguno de los candidatos tradicionales se convertirá en lo que los políticos de Estados Unidos llaman un… “spoiler”. Sí, como los de los coches que se usan para quitarles velocidad.
Este término no tiene equivalente válido en español, pero identifica a “alguien o a algo, que echa algo más a perder”. En este caso son candidatos presidenciales independientes que en lugar de ganar le han arruinado la elección a uno de los candidatos de los dos partidos principales.
Solo considere usted que desde 1900, cinco candidatos de terceros partidos: Theodore Roosevelt (1912), Robert La Follette (1924), Strom Thurmond (1948), George Wallace (1968) y John Hospers (1971). Ninguno capturó más de un voto electoral, de los 218 que se necesitan para ganar la presidencia en el colegio electoral nacional.
Los dos candidatos independientes más recientes; Ross Perot en 1992 y Ralph Nader en el 2,000 no ganaron ni un solo voto electoral y aun así tuvieron un impacto enorme en las elecciones nacionales:
- Ross Perot evitó la reelección de George H.W. Bush en 1992.
- Ralph Nader impidió que Al Gore le ganara a George W Bush en el 2000.
Los dos ofrecían alternativas y en elecciones apretadas, como en el 2024, un voto a favor de un tercer candidato es un voto en contra de los principales.
Algunas de las posiciones de Robert Kennedy Jr., podrían resultar atractivas para los republicanos decepcionados por Trump. Por eso le temen los republicanos.
Además, como siempre hay despistados demócratas, y algunos podrían confundirse y sin checar primero pensarían que es su deber respaldar a un Kennedy.
Mientras, la familia Kennedy… ¡está lívida!
Kerry Kennedy, hermana del candidato independiente, tuiteó una declaración conjunta de cuatro de sus 10 hermanos denunciando su candidatura.
Y ahora hasta los llamados “Expertos de Izquierda” del enorme grupo llamado Third Way, “Tercer Camino” en voz de Matt Bennett, uno de sus fundadores está ya denunciando a los candidatos de terceros partidos como RFK Jr. diciendo que “son saboteadores y lo único que logran es arruinar elecciones”.
La única encuesta que vale es la del día de la elección
Mientras hay sondeos como el realizado por el Comité de Acción Política llamado “American Values 2024"- Valores estadounidenses 2024, que encontró que, en una elección general entre Trump, Biden y un “candidato independiente” genérico, Trump ganaría con 40 por ciento del voto y dejaría a Biden atrás con un 38 por ciento. El candidato que usó American Values, no tenía ni nombre ni cara y aun así como candidato independiente se llevó un 17 por ciento del voto.
Más recientemente, cambiando esa misma encuesta y poniendo a Kennedy como tercero en discordia, las cosas cambiaron radicalmente. En una elección imaginaria entre Trump, Biden y Kennedy, este último obtendría el 19 por ciento de los votos y eso dejaría a Trump y Biden empatados con un 38 por ciento.
¿Se da cuenta?, el que perdió dos puntos… ¡fue Trump!
Lo cierto es que las dos campañas saben que Kennedy ya formó un círculo de incertidumbre para los dos candidatos y nadie sabe cuánto daño causará Kennedy, y a quien, hasta el día de la elección cuando los votos sean contados.
¿Quién es RFK Jr.?
Es el tercero de los 11 hijos de Bobby y Ethel Kennedy, en las décadas de los 60’s y 70’s él tuvo una vida de privilegios en el complejo familiar de Cape Cod en Massachusetts. Para este heredero, como para algunos de los otros jóvenes Kennedy, la fortuna, el nombre y las ventajas sociales terminaron siendo un estorbo.
El asesinato de su padre en 1968 en los Ángeles, el mismo día que había ganado la primaria de California en su campaña presidencial; y el de su tío en Dallas en 1963, marcaron al joven RFK Jr. y en su juventud lo dejaron a la deriva.
En sus años escolares, fue expulsado de dos internados antes de ser finalmente enviado a vivir con amigos de la familia. Las drogas lo marcaron y en los 80’s finalmente los médicos lo rescataron de las adicciones.
Cuando tenía 42 años le diagnosticaron “disfonía espasmódica”, un trastorno vocal sin causa conocida. Eso es lo que le impide hablar con claridad. Este episodio le hizo creer que la causa había sido una vacuna que él recibió contra la influenza. Los expertos en salud, lo contradicen diciendo que eso no es médicamente posible.
Aun con las dudas médicas, esta creencia lo convirtió en una voz líder del movimiento antivacunas de Estados Unidos. Esto creó confusión sobre la claridad de su pensamiento. Para empeorarla RFK Jr. ha avanzado la teoría de la conspiración de que los servicios de espionaje estadounidenses estuvieron detrás del asesinato de su tío JFK y ha hecho afirmaciones falsas y con cargas raciales sobre los orígenes de la pandemia del Covid-19.
Mientras su hijo, Conor Kennedy, que adquirió notoriedad por su breve noviazgo con Taylor Swift, se ofreció como voluntario para luchar en la Legión Internacional de Ucrania después de que Putin lanzara su invasión a gran escala en 2022.
Como si lo anterior no fuera suficiente, RFK Jr. afirma que Rusia está “actuando de buena fe” al intentar poner fin a la guerra en Ucrania. Al mismo tiempo diciendo que Estados Unidos alimenta el conflicto, como parte de su “gran plan estratégico para destruir a cualquier país, que, como Rusia, se resista a la expansión imperial estadounidense”.
Nicole Shanahan
Desde el martes, 26 de marzo, esta abogada multimillonaria es la candidata a la vicepresidencia con RFK Jr.. Nicole Shanahan tiene solo 38 años y es empresaria de high-tech. Su divorcio del fundador de Google le dejó cientos de miles de millones de dólares.
Shanahan también tiene dudas más mesuradas que las de Kennedy acerca del uso de las vacunas y seguramente tendrá mucho que aportar en un programa de gobierno, pero mientras, la atención sobre ella está centrada en sus millones de dólares. Desde 1976 en Estados Unidos un candidato puede gastar todo el dinero que quiera en su campaña, mientras sea su dinero, y haya sido legítimamente ganado.
En otra columna le presentaré las plataformas electorales de Trump, de Biden y de Kennedy. Mientras, “Ojo México”... les dejo algo para pensar. Los tres traerán por primera vez en muchos años agendas proteccionistas y la clara intención de reubicar a las industrias que se fueron, otra vez a territorio de Estados Unidos.
También les dejo para decidir si RFK Jr., es un traidor o solo un aguafiestas.