Repartidores por aplicación protestan en la Cámara de Diputados: Rechazan reforma a la Ley Laboral
Las protestas contra la propuesta de reforma a la Ley Laboral continúan, pues los repartidores por aplicación quieren que todo se quede como está.
Decenas de repartidores de plataformas de entrega por aplicación se congregaron hoy frente a la Cámara de Diputados para expresar su rechazo a la propuesta de reforma a la Ley Federal del Trabajo, la cual busca regularizarlos. Los manifestantes insisten en que estos cambios afectarían sus ingresos y limitarían su libertad laboral, algo que consideran inaceptable.
Pancartas y gritos contra la reforma a la Ley Laboral
Con consignas como “No queremos horarios fijos” y “No queremos ser empleados”, las decenas de repartidores marcharon en dos contingentes: uno salió del Teatro San Rafael con destino al Ángel de la Independencia, y otro se dirigió desde el Jardín Lecumberri hacia la Cámara de Diputados. En las pancartas que mostraban los repartidores se leían frases como “No te metas con mis ganancias”, reflejando su postura firme en contra de la regulación.
Aline Oropeza, repartidora, expresó su desacuerdo con la reforma, argumentando que no desean que les impongan horarios ni metas, pues prefieren la libertad de decidir cuándo y cuánto trabajar. Mariana Rodríguez, otra repartidora, coincidió: “Quiero trabajar a la hora que decida, sin que nadie me imponga un horario”.
Líderes de repartidores se reunieron con legisladores
Después de manifestarse frente a la Cámara de Diputados, los manifestantes conformaron una comitiva de 15 líderes de los repartidores, quienes fueron recibidos por legisladores en el recinto . Tras más de una hora de diálogo, Saúl Gómez, vocero de Repartidores Unidos de México, aseguró que su postura es clara: “Queremos que exista la opción de elegir si queremos seguridad social y regularización o seguir como estamos”.
La reforma busca brindar mayor seguridad a los trabajadores de plataformas, pero los repartidores temen que la regulación implique restricciones laborales y una reducción en sus ingresos. De momento, los repartidores no quitarán el dedo del renglón hasta que estén conformes con la nueva reforma a la Ley Laboral.