El Mercado de San Juan de Dios: El epicentro de la piratería en México
La piratería asfixia a la economía mexicana. Descubre cómo el mercado de San Juan de Dios, en Guadalajara, Jalisco, alimenta este negocio ilegal.
El mercado de San Juan de Dios, ubicado en Guadalajara, en el estado de Jalisco, es la primera parte donde llega la piratería que viene de China y Bélice. Vender productos pirata es el pan de cada día para miles de personas que trabajan ahí.
Una vez que llegan, los productos pirata pasan a México en lanchas a través del Río Hondo, el cual divide al país centroamericano con el territorio nacional.
Vendedores de piratería operan impunemente y de forma ilegal en México
Todo lo que se vende ahí, pasó de manera ilegal a México, sin que ninguna autoridad lo detuviera. En el mercado se encuentran gorras, playeras, pantalones, tenis, bolsas y juguetes de las marcas más populares. De acuerdo con ellos, la diferencia entre los productos oficiales y los suyos es el precio.
“Los tenis la mayoría son copias, según eso son copias de la mejor, de calidad 5. Ya las otras les cuestan a 500 para arriba, son de importación, son de China, son de mayor calidad.”, aseguran.
Piratería representa el 1,5% del PIB en México
La pirateria ataca a las marcas, empresas que están reguladas, que pagan impuestos, es simplemente una competencia desleal. Por si fuera poco afecta a la propiedad intelectual.
Ante esto, La Asociación Mexicana de Comercio y Cámara Nacional de la Industria de Transformación ( CANACINTRA ), estiman que está es la afectación económica:
“Algunos estiman que es casi el 1,5% por ciento del PIB nacional. Unos 69 mil millones de pesos en el acumulado y en varios años, en miles de millones de dólares de hecho, para fines prácticos en muchos grupos se considera como la segunda industria delictiva más redituable, después del narcotráfico.”, comenta Oliver Ambia, especialista en comercio exterior.
¿Por dónde llega la piratería a México?
La distribución de piratería se hace en todo el país y llega por las fronteras y por los principales puertos. Las principales entradas son el puerto de Lázaro Cárdenas en Michoacán, Altamira en Tamaulipas, Veracruz y la frontera de Belice con México.
Desafortunadamente México está en el top ten de países que permiten la piratería de manera directa o indirecta y en el número uno o dos de América Latina justo después detrás de Brasil por el tamaño de la economía.
Todos saben dónde está y de dónde viene, pero aunque la ley en México estipula que es un delito, solo se queda en papel.
