El embarazo es un momento de gran alegría y expectativas para muchas mujeres, pero ¿qué sucede cuando se experimenta todos los síntomas de uno sin estarlo? Esta condición, conocida como embarazo psicológico o pseudociesis, es un fenómeno que puede afectar profundamente quienes lo experimentan; ¿qué es y por qué sucede?
¿Cuáles son los síntomas de un embarazo psicológico?
El embarazo psicológico se caracteriza por la manifestación de síntomas físicos y emocionales propios del embarazo, como la ausencia de menstruación, náuseas matutinas, aumento de peso y agrandamiento del abdomen, entre otros.
El embarazo psicológico, utópico, imaginario o pseudociesis son algunos de los términos que hacen referencia a un síndrome raro en el que una mujer siente que está embarazada cuando en realidad no es así. Otra forma de denominar a este trastorno psicológico es el síndrome de Rapunzel.
¿Quiénes pueden tener un embarazo psicológico?
La mayor incidencia del embarazo psicológico ocurre en mujeres de entre 20 y 40 años. Este tipo de gestación “ausente” suele darse en mujeres en edad reproductiva, aunque puede aparecer antes.
Además, es habitual en mujeres que padecen problemas de tipo psicológico o que sufren ansiedad por lograr el embarazo. Generalmente, se produce en mujeres que presentan esterilidad y que llevan tiempo intentando conseguir el embarazo sin éxito.
¿Cuánto tiempo puede durar un embarazo psicológico?
Pese a que no existe un embarazo verdadero, las pruebas de embarazo pueden salir positivas. La duración de un embarazo psicológico es variable, pudiendo llegar incluso a durar los nueve meses de una gestación. Además, algunas mujeres presentan dolores intensos similares a los que ocurre cuando se ponen de parto.
¿Cómo se diagnostica el embarazo psicológico?
Personal de salud especializado debe realizar además de la prueba de embarazo (que como se mencionó esta pueda dar positivo y llevar a confusión), una exploración física, una ecografía y comprobar el tamaño del útero.
Es importante que las mujeres que creen estar experimentando un embarazo psicológico busquen atención médica para descartar otras condiciones y recibir el apoyo adecuado.
Las mujeres que experimentan un embarazo psicológico a menudo tienen un fuerte deseo de ser madres y pueden haber experimentado dificultades para concebir en el pasado. Esto también puede generar una gran presión emocional y desencadenar una respuesta hormonal que imita un embarazo real.