El doxing es una forma de acoso y extorsión digital que ha afectado a millones de personas a nivel mundial al exponer información personal y confidencial. Dicha práctica ha tomado relevancia en los últimos años debido a ataques cibernéticos como los del grupo de hackers “Anonymous”, quiénes en 2011 revelaron información sensible de las fuerzas de seguridad internacional.
¿Qué es el doxing y en qué consiste?
El término doxing se refiere a las acciones intencionales de investigar y revelar públicamente información personal sobre personas u organizaciones a través de internet, esto con el objetivo de dañar su reputación.
Esta información puede incluir desde datos básicos como nombres, direcciones y números de teléfono hasta detalles más sensibles como historiales médicos, información financiera e incluso contraseñas.
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— Adrián Alcalá (@AdrianAlcala75) February 22, 2024
Cualquier persona que considere que sus #DatosPersonales han sido vulnerados puede acercarse al @INAImexico.
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“Doxing” proviene de la abreviación de “exponer dox”, siendo a su vez “dox” una nueva forma de escribir “docs” que es la abreviatura de “documentos”. Dicho término fue acuñado por hackers en la década de los noventa cuando el internet comenzó a extenderse en todo el mundo.
Esta práctica se lleva a cabo con la intención de intimidar, acosar, avergonzar o causar daño a la persona afectada. Los doxers, es decir, las personas o hackers que realizan el doxeo, pueden obtener esta información a través de diversas fuentes, incluidas redes sociales, registros públicos y métodos de hackeo.
El doxeo no solo viola la privacidad y la seguridad de la víctima, sino que también puede tener consecuencias graves, como acoso cibernético, robo de identidad, daño a la reputación y, en casos extremos, peligro físico.
¿Cómo se castiga el doxing?
El doxing es considerado un delito en muchos países y puede ser castigado con severidad, especialmente cuando resulta en daños significativos para la víctima. Las leyes que abordan estas acciones varían según la jurisdicción, pero generalmente incluyen disposiciones relacionadas con la privacidad, el acoso, la intimidación y la seguridad cibernética.
Las penas por estas prácticas pueden incluir multas substanciales, prisión y medidas correctivas para ayudar a reparar el daño causado a la víctima. Además, las plataformas en línea suelen tener políticas estrictas y pueden suspender o prohibir a los usuarios que participen en esta actividad.
Es importante destacar que el doxeo también puede tener repercusiones legales civiles, lo que significa que la víctima puede demandar al doxer por daños y perjuicios, buscando compensación por el daño sufrido.
En México, el doxing se considera una violación grave de la privacidad y la seguridad cibernética. Las
leyes mexicanas
tipifican este tipo de acciones como un delito que puede resultar en sanciones legales significativas. Las penas por doxing pueden incluir multas y tiempo de prisión, dependiendo de la gravedad del caso y el daño causado a la víctima.