En el corazón del Pacífico mexicano, entre las imponentes Islas Marías , se localiza un coloso de piedra: el Cristo Rey, nacido de la fe y el trabajo de los reclusos de la colonia penal que habitó las islas entre 1905 y 2013. La figura representa más que una estatua, se trata de un símbolo de transformación, un faro de esperanza, ¿qué esconde detrás de su historia? Esto es lo que tienes que saber.
¿Cuánto se tarda en subir el Cristo Rey de las Islas Marías?
El Cristo Rey de las Islas Marías se encuentra ubicado en la cima del Cerro del Comején, en la Isla María Madre, conocida por ser la más grande del archipiélago. Para llegar hasta él, hay que caminar por un sendero de aproximadamente 2.6 kilómetros que parte desde Puerto Balleto, el principal poblado de la isla.
Aunque el sendero no es muy exigente, sí tiene algunas pendientes considerables, ya que el camino es solo el medio para apreciar el imponente monumento de 17 metros de altura. Una figura hecha de piedra, arena y cemento.
Historia del Cristo Rey de las Islas Marías
La historia del Cristo Rey de las Islas Marías se remonta a 1946, cuando el entonces capellán de la prisión, el padre José Ramírez Guízar, propuso la idea de erigir una estatua de Cristo como símbolo de redención y esperanza para los presos. La construcción del coloso se encontró a cargo de los propios reclusos de la colonia penal federal.
Más allá de su valor religioso, el Cristo Rey representa la capacidad de transformación porque su edificación conllevo la dedicación de cientos de presos a lo largo de dos años. Los materiales utilizados durante este tiempo fueron principalmente piedra, arena y cemento, extraídos y procesados en el archipiélago. La obra se completó en 1949 y se convirtió en un ícono religioso y cultural para las Islas Marías.
Ahora, las Islas Marías son un complejo turístico en plena transformación, lo que antes se trataba a de una presión federal, hoy en día se ha convertido en un paraíso que invita a la exploración, el descanso y la conexión con la naturaleza.
