Seguramente al comer piña has experimentado la sensación de hormigueo, a veces ardor o incluso picor, que es conocida como escaldar la lengua, pero no hay porque sufrir más, ya que la UNAM revela cómo puede evitarse esta situación provocada al deleitarnos con esta deliciosa fruta.
La piña escalda la lengua porque contiene importantes cantidades de una enzima de tipo proteolítica llamada “bromelina”, que descompone y comienza a simplificar las proteínas que va tocando el paladar, por lo que al tener contacto con la lengua o boca, se inicia un proceso de destrucción que provoca la sensación de ardor y comezón.
Dicho de otra forma, al comer piña, estas enzimas digieren la proteína de los tejidos de nuestra lengua, parecido a un “moco protector” que recubre la boca, pero al eliminar esta protección este órgano se vuelve mucho más sensible y se irrita con mayor facilidad.
Pero entonces, ¿la piña nos está comiendo a nosotros? Cabe aclarar que la bromelina no es perjudicial para los seres humanos y la lengua es capaz de reconstruir tanto las proteínas como los aminoácidos perdidos en tan solo segundos, por lo que la sensación no dura demasiado.
¿Cómo evitar que la piña escalde la lengua al comerla?
De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), existe una forma en que puede evitarse esta sensación de picazón, ardor u hormigueo al comer, y es evitar comer el corazón de esta fruta, porque concentra la mayor cantidad de la enzima responsable de causar esta molestia.

Otro método para evitar la sensación incómoda es remojar esta fruta en agua salada antes de cortarla, debido a que al reaccionar con este compuesto compuesto iónico, se reduce el efecto que la enzima puede tener en nuestra lengua.
Ahora que cuentas con esta información, comer piña no será un tormento y disfrutarás de esta fruta que aporta hasta un 131% del valor recomendado de vitamina C, encargada de evitar resfriados y gripa.