El ‘Nuevo Guanajuato’, construido sobre la ciudad original; conoce la misteriosa verdad

El ‘Nuevo Guanajuato’ tiene una historia oculta que, para existir, tuvo que ‘aplastar’ a la ciudad de origen; conoce la misteriosa verdad.

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Por: Rafael Lira-Daniel Rivera

Bajo el Guanajuato que conocemos de las Ocho Musas, el Teatro Juárez y el Pípila hay otro Guanajuato, el original. Está a casi ocho metros bajo tierra. En pleno centro histórico descubrimos un exconvento, era de los ‘Dieguinos’ y bajamos. Los murales de esta orden religiosa siguen ahí. Lo que cambió fue el tamaño del patio. Antes, el pozo estaba en medio. Las imágenes muestran cómo era antes.

“Aquí tuvieron que hacer esta recreación porque no se puede excavar, porque se encuentran los cimientos del Teatro Juárez”, explicó el cronista Eduardo Vidaurri.

Así fue como se edificó el nuevo Guanajuato

Aquí es justo donde se encontraban las puertas de este centro de culto, pero hoy, si escarbamos, encontramos tierra, estamos a unos seis metros hacia abajo de la superficie.

Ahí nos encontrábamos bajo lo que hoy conocemos como el templo de San Diego, frente al Jardín de la Unión. Este era el plano de Guanajuato en 1750, pero en 1760 se decidió elevar la ciudad con la tierra de las minas. La causa: las lluvias, las inundaciones, eran iguales a muertes. Se financió con el dinero de las mineras, que estaban en su máximo esplendor.

“Fue necesario elevar el nivel de la caja del río unas siete varas, que esto equivaldría más o menos a unos 8.5, casi 9 metros, y a partir de ahí todo lo que quedaba en el nuevo nivel, fue sepultado para poder construir el Guanajuato que nosotros conocemos ahora”, agregó Eduardo Vidaurri.

Justo donde estoy parado era el nivel original de la ciudad de Guanajuato Capital, pero volteen para acá arriba, ahora me encuentro en el nivel justo actual de la ciudad de Guanajuato, capital.

El Guanajuato original se sepultó con pico y pala y por secciones, desde el templo de San Francisco hasta el mercado Hidalgo, casi un kilómetro de largo. Tardaron casi cinco años.

Es por eso que el centro tiene una ciudad abajo. Hay leyendas de que encontraron tesoros. Otros más hallaron una forma de atraer visitantes, como este hotel de la calle Alonso, lo que era la ciudad, es ya un sótano.

“Estos muros, como lo puedes ver, tienen alzadas muy altas; yo estimo por aquí que desde el nivel donde nos encontramos hasta la alzada más alta rebasa fácilmente los 20 metros”, explicó el cronista.

Cuando esté en Guanajuato, no olvide que camina sobre una ciudad que no es una leyenda, sino parte de la historia.

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