Investigadores dicen que una niña de Georgia de 12 años puede haber muerto como resultado indirecto de una infestación grave de piojos, que habría durado años. Los detalles sobre la muerte de Kaitlyn Yozviak se discutieron durante una audiencia preliminar el pasado lunes.
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Un juez del condado de Wilkinson dictaminó que hay suficiente evidencia de los cargos de asesinato en segundo grado contra los padres, Mary Katherine “Katie” Horton y Joey Yozviak, para presentarse ante un gran jurado.
Las autoridades dicen que los registros médicos muestran que Kaitlyn murió de un paro cardíaco por una causa secundaria de anemia severa.
El agente especial de la Oficina de Investigaciones de Georgia, Ryan Hilton, dice que las picaduras repetidas de los piojos redujeron los niveles de hierro en la sangre de la niña, lo que posiblemente causó anemia y desencadenó el ataque cardíaco.
Just this morning Kaitlyn’s father, John Yozviak, was arrested and charged with her murder and cruelty to children. pic.twitter.com/ZJEc88CDB0
— Camille Gayle (@Camille_WGXA) September 1, 2020
Hilton testificó que, en el momento de su muerte, Kaitlyn tenía la infestación de piojos “más grave” que la oficina de GBI había visto, y pudo haber durado intermitentemente durante al menos tres años.
Mencionó que creía que las picaduras repetidas de los piojos reducían sus niveles de hierro en la sangre, lo que probablemente causó la anemia y pudo haber desencadenado el ataque cardíaco.
Su madre también le comentó a los investigadores que Kaitlyn no se había bañado en la última semana y media antes de morir.
Cuando los agentes llegaron a la casa en agosto, el interior estaba sucio y en mal estado, con alimañas cubriendo el colchón, peluches y otros muebles en la habitación de Kaitlyn.
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Los vecinos dijeron a los agentes que no habían visto a la pequeña jugando en la casa durante el último mes y medio o dos meses antes de su muerte.
