Las escuelas primarias en la capital de India, Nueva Delhi, cerrarán para proteger a los niños de la contaminación que asfixia a la megaciudad de 20 millones de personas, dijeron las autoridades el viernes.
El humo de los agricultores que queman rastrojos, los gases de escape de los vehículos y las emisiones de las fábricas se combinan cada invierno para cubrir la capital con una neblina gris mortal.
El viernes, los niveles de las partículas PM2.5 más peligrosas, tan pequeñas que pueden ingresar al torrente sanguíneo, eran casi 25 veces superiores al máximo diario recomendado por la Organización Mundial de la Salud, según la firma de monitoreo IQAir.
La capital India se encuentra sumida bajo un manto de niebla tóxica, que limita la visibilidad, y con el índice de la calidad del aire (AQI) en 466, sobre una escala que contempla un máximo de 500 puntos.
Niños afectados por contaminación
El primer ministro de Delhi, Arvind Kejriwal, criticado por los residentes y los opositores políticos por no abordar la crisis, dijo que las escuelas primarias estarían cerradas a partir del sábado hasta que “mejore la situación de la contaminación” para protección de los niños.
“Ningún niño debería sufrir de ninguna manera”, dijo Kejriwal a los periodistas.
Una de las ciudades más contaminadas del mundo
Nueva Delhi se clasifica con frecuencia como una de las ciudades más contaminadas del mundo. El viernes volvió a encabezar la lista de IQAir de las principales ciudades con la peor calidad del aire.
Un estudio de Lancet de 2020 atribuyó 1.67 millones de muertes a la contaminación del aire en India durante el año anterior, incluidas casi 17,500 en la capital.
Las autoridades anuncian regularmente diferentes planes para reducir la contaminación, por ejemplo, deteniendo los trabajos de construcción, pero con poco efecto.
El deterioro alarmante de la calidad del aire de Nueva Delhi es habitual en esta época del año, cuando coinciden una serie de factores como la llegada del invierno y la disminución de los vientos que impiden la dispersión de los agentes contaminantes.