Por siglos, el lobo terrible ha vivido entre la leyenda y la ciencia. Pero no se trata de una criatura mitológica ni un invento de ficción como en Juego de Tronos: fue real, poderoso y uno de los grandes depredadores del Pleistoceno.
Hoy, un ambicioso proyecto biotecnológico afirma haberlo traído de vuelta. Pero, ¿quién era en realidad este lobo imponente? ¿En qué se parece, y en qué no, a los que han sido modificados genéticamente para imitar su especie?
¿Qué es el lobo terrible y cómo vivía?
Su nombre científico es Aenocyon dirus, conocido como lobo terrible o dire wolf; habitó América del Norte y del Sur hasta hace unos 10,000 años.
Era más grande y robusto que un lobo gris, con una mordida 30% más potente, se alimentaba de grandes mamíferos como bisontes, caballos y perezosos gigantes. Probablemente vivía y cazaba en manada, como lo hacen los lobos actuales.
Su longitud corporal era de 1.25 metros, tenía una altura de 80 cm, pesaba hasta 68 kilos y su extinción se debe probablemente al cambio climático, la desaparición de sus presas y la llegada de nuevos competidores, incluidos los humanos.
¿El lobo terrible era pariente del lobo gris?
Genéticamente, no tanto. Durante mucho tiempo se creyó que el lobo terrible era una versión antigua y más robusta del lobo gris (Canis lupus), pero un estudio genético publicado en Nature en 2021 demostró que, a pesar de su apariencia, ambos pertenecían a linajes distintos.
La investigación reveló que el Aenocyon dirus se separó evolutivamente del ancestro común del Canis lupus hace unos 5.5 millones de años. Desde entonces, evolucionó de manera aislada en América.
A diferencia de otros cánidos, los lobos terribles no se cruzaron con lobos grises, coyotes ni perros, una rareza entre especies emparentadas. En términos genéticos, el lobo terrible está más cerca de ciertos chacales africanos que de los lobos que conocemos hoy.
¿Qué tienen de lobo gris los lobos “desextintos”?
A simple vista, el lobo terrible y el lobo gris se parecen: ambos tienen cuerpo alargado, hocico agudo y orejas triangulares. Sin embargo, las diferencias se acumulan en los detalles.
Características del lobo terrible (Aenocyon dirus):
- Más robusto y pesado que el lobo gris
- Patas más cortas y musculosas
- Cráneo más ancho y mandíbula adaptada para romper huesos
- Dentadura especializada para aprovechar carroña
- Probable pelaje rojizo o más claro
- Evolucionó para cazar grandes presas del Pleistoceno
Características del lobo gris (Canis lupus):
- Más esbelto, ágil y adaptable
- Patas más largas y cuerpo más liviano
- Dentadura menos especializada, pero eficaz para diversas presas
- Pelaje gris oscuro, blanco, negro o mixto según la región
- Dieta más amplia: desde venados hasta pequeños mamíferos, frutas y carroña
- Capaz de sobrevivir en climas y entornos variados, desde tundras hasta desiertos
The world’s first de-extincted animals, dire wolf brothers Romulus and Remus, were born on October 1, 2024. They are best buds, growing stronger every day, and they live together on a secure, expansive ecological preserve. And while they’re BFFs, they are being socialized with… pic.twitter.com/WSZz3sUTgj
— Colossal Biosciences® (@colossal) April 9, 2025
Hace unos días, Colossal Biosciences anunció el nacimiento de tres crías que, según afirman, reviven al lobo terrible: Romulus, Remus y Khaleesi.
Pero el proceso no fue un clonaje completo, ya que el ADN del Aenocyon dirus no está conservado en su totalidad.
Lo que hicieron, fue secuenciar fragmentos genéticos de fósiles de entre 13,000 y 72,000 años de antigüedad. Luego, identificaron 20 rasgos distintivos de la especie extinta, como el tamaño, el color del pelaje, la forma del cráneo y los patrones de vocalización.
Posteriormente, editaron esos genes en células de Canis lupus, modificando su código para que expresaran esas características y finalmente, las células fueron implantadas en óvulos de lobo gris. Las crías fueron gestadas por perras domésticas.
El resultado: animales vivos con rasgos físicos del lobo terrible, pero con un genoma parcialmente gris y sin la secuencia completa del extinto Aenocyon dirus.
¿Desextinción o edición genética?
El anuncio de su regreso a la vida ha generado un intenso debate. ¿Se puede decir que han revivido al lobo terrible si el animal tiene solo fragmentos de su ADN y fue gestado a partir de una especie viva?
Desde un punto de vista científico, no se trata de un clon ni de una resurrección literal, sino de una recreación parcial basada en edición genética.
Los lobos nacidos en laboratorio son híbridos que imitan ciertas características físicas del extinto, pero siguen siendo lobos grises genéticamente modificados.
¿Qué pasa si se libera al lobo terrible?
Una de las preguntas más importantes no es científica, sino ecológica: ¿qué ocurriría si estos animales fueran liberados en la naturaleza?
El lobo terrible evolucionó para cazar grandes presas que ya no existen, en ecosistemas que han cambiado drásticamente. Reintroducir un depredador con fuerza y comportamiento desconocidos podría alterar el equilibrio de las especies actuales, sobre todo si no se conocen bien sus interacciones con otras.
Además, ¿quién sería responsable de estos nuevos animales? ¿Podrían reproducirse? ¿Serían considerados lobos terribles o una nueva especie creada en laboratorio?
El proyecto ha despertado la curiosidad de algunas comunidades indígenas, como la Nación MHA (Mandan, Hidatsa y Arikara), que ha mostrado interés en alojar a estos animales en sus tierras, pero aún no está claro qué rol jugarán en un ecosistema moderno.
Hoy, los lobos terribles ya no solo viven en los fósiles o en la ficción, sino en un punto intermedio entre ciencia y tecnología. Lo que está en juego ya no es solo traer de vuelta a una especie, sino decidir por qué lo haríamos… y si deberíamos hacerlo.
¿Hay lobos terribles en Juego de Tronos?
Aunque en la serie los llaman “lobos huargo”, los animales que acompañan a los hijos de Ned Stark están claramente inspirados en el lobo terrible real (Aenocyon dirus).
En el universo de Canción de Hielo y Fuego, los lobos huargo son más grandes, fuertes e inteligentes que los lobos comunes. Alcanzan el tamaño de un poni y tienen sentidos agudos, una conexión emocional con sus dueños, e incluso habilidades místicas, como la de compartir la conciencia con humanos cambiapieles.
Aunque los lobos de Invernalia, no son copias exactas del Aenocyon dirus, comparten varios elementos clave: gran tamaño, fuerza, presencia dominante y ese aire de animal ancestral y poderoso. En términos científicos, el verdadero lobo terrible no tenía habilidades sobrenaturales, pero era lo bastante impresionante como para inspirar leyendas… y ficción épica.
En resumen: sí, los lobos de Juego de Tronos tienen una pata en la paleontología y otra en la fantasía medieval.
Y si alguna vez Romulus, Remus o Khaleesi llegan a parecerse a ellos, será porque la ciencia y la narrativa decidieron encontrarse en un punto muy interesante.