¡Tómalo en cuenta! Observar la carne que consumimos es una práctica importante para asegurar su calidad. Si bien la presencia de gusano barrenador es poco frecuente gracias a los controles sanitarios, es útil conocer qué buscar para mantener la tranquilidad. Te explicamos los aspectos clave que debes tener en cuenta al examinar nuestros alimentos.
¿Qué causa el gusano barrenador en el ganado?
De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México ( UNAM ), el gusano barrenador, conocido científicamente como Cochliomyia hominivorax, es una larva de mosca que causa una infestación conocida como miasis en animales de sangre caliente, incluyendo ganado y, en raras ocasiones, humanos.
Esta infestación ocurre cuando las moscas depositan sus huevos en heridas abiertas o lesiones de los animales, donde las larvas eclosionan y comienzan a alimentarse del tejido vivo, lo que puede provocar graves daños e infecciones si no se trata a tiempo. Aunque México logró erradicar esta plaga en 1991 y ha mantenido su estatus libre de Cochliomyia hominivorax, el gusano barredor sigue presente en otras partes de América del Sur y el Caribe, como Argentina, Brasil y Venezuela, por lo que la vigilancia constante es crucial para evitar su reintroducción en nuestro país.
¿Cómo afecta el gusano barrenador al humano?
El gusano barrenador puede afectar a los humanos causando lesiones graves en la piel. La infestación por este parásito se conoce como miasis, que es la invasión de larvas en heridas abiertas. Puede generar complicaciones como infecciones bacterianas secundarias o riesgo de fiebre. Los
principales síntomas
son:
- Dolor intenso en la zona afectada.
- Sensación de movimiento dentro de la herida.
- Lesiones cutáneas con secreción maloliente
Su tratamiento va desde la extracción quirúrgica de las larvas, así como cuidados locales para prevenir infecciones. Para evitar complicaciones se recomienda mantener heridas limpias y protegidas, especialmente en áreas endémicas.
¿Cómo identificar la carne infectada por el gusano barrenador?
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, indica que los animales infectados por el gusano barrenador tienden a separarse del grupo, muestran signos de depresión, pérdida de apetito y molestias en las heridas. Sin tratamiento, pueden morir entre 7 y 14 días después debido a toxicidad o infecciones secundarias.
Para identificar carne infectada se recomienda observar que NO presente heridas profundas, a menudo con secreción purulenta y un olor fétido, lo que indica posible infestación. En casos de infestación, las larvas pueden ser visibles en las heridas o en la superficie de la carne. Estas son de color blanquecino y pueden crecer considerablemente. También puede haber conjuntos de huevos en la herida o alrededor de ella, dispuestos en forma de tejas, esto es un indicativo de que las moscas han depositado sus huevos.