Luisito no pierde la esperanza: El pequeño guerrero de Acapulco que lucha contra un cáncer terminal
Luisito, un pequeño guerrero de Acapulco, enfrenta al cáncer terminal con una sonrisa y esperanza. Su familia clama por un milagro. ¡Conozcamos su historia!
Luis Moreno, un niño de Acapulco, Guerrero, enfrenta una dura batalla contra un cáncer que todos los especialistas catalogan como terminal, pero su historia está llena de valentía y amor inquebrantable. Aunque el cáncer ha avanzado de forma irremediable, provocando que el tumor en su pierna haya roto algunos de sus huesos, Luisito continúa siendo un símbolo de fortaleza, disfrutando cada momento y sonriendo a pesar de las dificultades.
Apenas en julio, Luisito cumplió un gran sueño: asistir a la clausura de sus estudios, donde recibió su título de culminación. Aunque llegó en camilla y agotado, su determinación fue evidente para todos; sin embargo, desde entonces, el cáncer ha progresado, y actualmente Luisito permanece en cama, sin poder caminar.
A pesar de esto, él sigue encontrando razones para sonreír y le muestra a su familia el lado positivo de cada día, quienes atendieron los micrófonos de Fuerza Informativa Azteca (FIA) y contaron su historia para todo México.
“Me dijo: mamá, yo ya no quiero quimioterapias, ya me quiero ir a casa con mis abuelitos, comer lo que yo quiera y estar tranquilo”, señaló Dulce, la madre de Luisito.
¿Qué tiene Luisito, el niño con cáncer terminal de Acapulco?
El tratamiento de Luisito ha requerido continuos viajes a la Ciudad de México (CDMX), costosos tratamientos y cuidados especializados, que representan una carga económica significativa para su familia, pues se trata de un tumor cancerígeno que se desarrolló en su pierna izquierda.
La mamá de Luisito describe esta situación como desgastante, pero llena de amor y de esperanza, pues sueña con verlo recuperado y feliz. “El tumor le ha avanzado mucho; lo lleva hasta la cadera, le han cambiado las quimioterapias varias veces y no ha funcionado. El médico nos dio como opción amputarle la pierna”, explica su madre.
Actualmente, el daño es irreversible, y Luisito recibe cuidados paliativos en casa de sus abuelos, donde disfruta la compañía de sus seres queridos.
“Estoy mal... Es mi único hijo y, desde lo del brazo. Si hubiéramos permitido que el brazo se lo quitaran, él no lo tuviera y ahorita me dicen de la pierna, que le va a regresar (el cáncer) y mira ahorita... Yo lo que quiero es que ya no sufra”, sentenció.
Familia de Luisito convirtió su casa en bazar para obtener más recursos
En un esfuerzo por recaudar fondos, su familia ha convertido su hogar en un pequeño bazar, vendiendo artículos para reunir dinero para una nueva operación, con la esperanza de que esta le permita a Luisito volver a caminar.
Luisito, amante de los dinosaurios y con un espíritu inquebrantable, sigue siendo un ejemplo de esperanza. Su familia mantiene viva la fe en un milagro que le devuelva la salud y la oportunidad de seguir soñando.