Una era ha llegado a su fin en la Ciudad de México (CDMX), pues un lugar que por más de cinco décadas fue sinónimo de reuniones familiares, noches de amigos y buena comida ha cerrado sus puertas. La noticia del cierre de Mr. Kelly ha conmocionado a los capitalinos, quienes han crecido disfrutando de sus icónicas hamburguesas. Así fue su último día.
Mr. Kelly trajo alegría y buenos momentos por 56 años a CDMX
En total fueron 56 años de historia. Cinco décadas en que este local en avenida Insurgentes los albergó. Finalmente, hoy la tradicional hamburguesería baja su cortina.
“Yo las conocí desde cuando abrieron, veníamos con amigas, con una novia y después casados sí, todas las generaciones.”, contó Carlos Calderón, uno de sus más fieles clientes.
Clientes esperaron horas para comer en Mr. Kelly por última vez
Un domingo de noviembre del 2024 fue el último día de servicio de este icónico restaurante de hamburguesas. Por este motivo, las filas de día y de noche abarcaron más de la mitad de una cuadra. El tiempo de espera era de más de una hora.
“Había gente que venía con 8, 9 personas la fila llegaba casi casi hasta la otra esquina. Igual este venía gente ya muy mayor que nos dijo que ellos estuvieron cuando aperturaron la tienda, cuando fue la inauguración y todo y que pues sí, era feo pues el ver cómo la cerraban porque pues era como una vida para ellos.”, señaló César Cruz, un vecino de Mr. Kelly.
Generaciones de clientes se reunieron para despedir a Mr. Kelly
Algunas personas como Doña Yolanda tienen recuerdos de su infancia en esta hamburguesería de la CDMX. Ella recuerda haber ido de niña con sus padres y luego de mamá con sus hijas.
“De antaño, que fue desde mis padres hasta mis hermanos, sus hijos, mis hijas. Estos días que anunciaron ya el cierre, fue un colonón para llegar ahora sí que probarla por última vez.”, relató Yolanda Rosa.
Mr. Kelly cerró sus puertas con todo y mariachis
Todos se llevaron la foto del recuerdo.Por último, los clientes despidieron al icónico restaurante entre aplausos y luego de la ovación y las palmas, llegó el mariachi.
Por última vez se recordaron anécdotas y memorias, que hoy cierran el ciclo de una empresa mexicana como lo fue Mr. Kelly.