¡No solo México arde con temperaturas superiores a los 45 grados ! El Servicio europeo de Cambio Climático de Copernicus (C3S) reveló que con solo 11 días, junio ya es el mes más calurosos en toda la historia de la Tierra.
De acuerdo con un estudio publicado por el C3S, durante los primeros once días del mes de junio se rompió la barrera los 1.5 grados, que es el estándar aceptable para el “sobrecalentamiento” del planeta, es decir, que la temperatura promedio mundial se elevó a niveles tan altos que dio como resultado la temporada más calurosa nunca antes vista.
El mundo vive su mes más caluroso desde 2015: C3S
Aunque es la primera vez en la historia de la Tierra que se supera este límite, los meses con temperaturas promedio por arriba de los 1.5 °C son cada vez más comunes.
La última vez que un fenómeno similar ocurrió fue en diciembre de 2015, cuando se superó por primera vez el umbral aceptable para el “sobrecalentamiento” del planeta, y se sobrepasó repetidamente en los inviernos y primaveras de 2016 y 2020.
Lamentablemente, el Servicio de Cambio Climático de Copernicus explicó que no será la última vez que nuestro planeta se enfrente a temperaturas históricas, jamás registradas, ya que de continuar por la misma línea, se prevé que el próximo año el mundo viva una onda de calor incluso más extrema que la del presente.
¿Cuándo volverá la Tierra a tener una temporada igual de calurosa que 2023?
El informe destaca que hay un “98 % de probabilidades de que al menos uno de los próximos cinco años, y el quinquenio en su conjunto, sea el más cálido jamás registrado"; sin embargo, se considera muy pronto para saber con qué frecuencia.
Por otro lado, hay un 32 % de probabilidades de que la media quinquenal supere este límite, “aunque los efectos del calentamiento global varían ‘considerablemente’ de acuerdo a la estación y el lugar”, por ejemplo, si se mantienen las altas temperaturas habrá grandes sequías en puntos clave del mundo, lo que a su vez provocará la destrucción de cultivos e incendios forestales.
Dados los resultados, el C3S concluyó que es necesario “vigilar atentamente” la elevación de temperaturas para saber con qué rapidez se acerca el planeta a los umbrales a largo plazo.