Jalisco elimina el uso obligatorio de uniformes para las mujeres privadas de la libertad en todos los reclusorios del sistema penitenciario del estado. Con esto, se convierte en la primera entidad que prioriza los derechos humanos de las mujeres reclusas y permite que usen ropa convencional del color que deseen.
Durante un evento realizado en la Comisaría de Reinserción Social Femenil de Puente Grande este martes 8 de octubre, en el que estuvieron presentes autoridades de la Dirección General de Prevención y Reinserción Social de Jalisco y reclusas del penal, se hizo pública la nueva normativa que elimina la obligatoriedad del uso del uniforme entre las mujeres que permanecen en prisión preventiva. Además, como acto simbólico, las reclusas quemaron sus uniformes en un tambo en llamas, mientras se escuchaban aplausos y voces de alegría.
¿Qué ropa podrán usar las internas del reclusorio femenil de Puente Grande?
El director general de Prevención y Reinserción Social de Jalisco, José Antonio Pérez Juárez, explicó que a partir de este martes las mujeres reclusas de Puente Grande y del resto de reclusorios del estado no estarán obligadas a portar uniformes. La única restricción son dos colores, negro y azul, ya que son los utilizados por el personal de custodia y las personas que ingresan como visitas, por lo que fuera de estos dos colores, las reclusas podrán utilizar los que gusten.
Además, el director general afirmó que esta normativa no viola ninguna ley, pues está subordinada a la Constitución Mexicana en materia de observancia obligatoria y enunciativa de los derechos humanos, además acata la convención interamericana de los Derechos Humanos y la Ley Nacional de ejecución penal.
Cabe resaltar que en el caso de las reclusas que se encuentren en situación de desventaja económica, el sistema penitenciario estatal les proveerá de ropa a manera de apoyo. Actualmente, en el estado de Jalisco hay cerca de 700 mujeres en prisión.
¿Habrá más medidas de seguridad?
Respecto al tema de seguridad, José Antonio Pérez Juárez dijo que no habrá reforzamiento de medidas de seguridad para evitar la fuga de las reclusas que ahora portarán ropas de diferentes colores, pues en más de 200 años solo ha habido una fuga, por lo que la ropa nunca ha sido un recurso de evasión de la justicia. Por lo que continuarán con los controles de seguridad habituales, como lo es el pase de lista tres veces al día.
Por último, el director mencionó que en una segunda etapa, los varones que permanecen en prisión preventiva también podrán utilizar ropa convencional. Esto como parte del reconocimiento del estado a la presunción de inocencia que mantiene a hombres y mujeres por igual en prisión preventiva, que a veces dura años.
