Urgen controles en la Inteligencia Artificial; su rápido crecimiento representa algunos riesgos
Urgen controles en el desarrollo de la Inteligencia Artificial que ya se encuentra entre nosotros pero que presenta algunos riesgos en su acelerado crecimiento.
La Inteligencia Artificial avanza rápidamente y los países pronto van a requerir ponerle controles En la Casa Blanca ya se está hablando de cómo equilibrar los riesgos y los beneficios de la Inteligencia Artificial. El Presidente Biden señala que: “Para hacer realidad la promesa de la IA y evitar los riesgos, debemos gobernar esta tecnología”.
Estados Unidos, pronto exigirá a quienes desarrollen esta tecnología, compartir sus pruebas de seguridad con el gobierno federal, antes que con el público. Esto advertirá si un modelo de Inteligencia Artificial presenta riesgos para la seguridad nacional, la economía o ¡la salud!
Washington ofrecerá visas de estudio y trabajo a quienes desarrollen nueva Inteligencia Artificial. Vigilando para evitar la producción de materiales biológicos peligrosos y para minimizar el efecto de que la tecnología desplace a los humanos de sus empleos.
El doctor Bruce Schneier de Harvard Kennedy School, advierte que esto requiere de equilibrio: ”No son tecnologías libres. Son más como productos farmacéuticos, si se equivocan y la gente muere”. La Inteligencia Artificial puede mejorar la forma en que vivimos y trabajamos, pero es tecnología que necesita estar controlada. El doctor Schneier, señala que: “Este será el inicio de un proceso internacional muy largo, pero es un inicio y es un comienzo importante”.
Un buen ejemplo es la compañía Uber. Emmanuel tiene 4 años manejando para ellos, pero ahora a este chofer, el futuro le preocupa mucho. Emanuel dice que: “Igual que Uber cortó a los taxis, Waymo va a eliminar a Uber!”.
Uber y Waymo ya se hicieron socios. Waymo es la compañía líder en el mundo de automóviles autónomos. Hoy en Phoenix, se puede contratar un Uber sin chofer. El futuro son los robo-taxis, autos independientes sin nadie detrás del volante. Muchos aún no confían en esta tecnología y prefieren tener a un ser humano conduciendo el taxi, pero ya en Phoenix hoy, la opción de taxis autónomos es realidad.