Un incendio forestal que ha destruido miles de hectáreas de bosques de pinos en el sudoeste de Francia se reavivó a raíz de una nueva ola de calor y la sequía, indicaron este miércoles las autoridades.
Unas 6,000 hectáreas más de bosques de pinos ardieron en las Landas desde el martes por la tarde, obligando a la evacuación de unas 6,000 personas, señaló responsables de la región de Gironda en un comunicado.
“El fuego es extremadamente violento y se ha extendido del departamento de las Landas” hacia el sur, hogar del parque regional de las Landas de Gascuña, dijo la prefectura francesa.
Es un gran incendio, mucho más intenso y rápido
“Es un gran incendio, mucho más intenso y rápido” que el registrado en julio en la misma región, señaló a la prensa Marc Vermeulen, de los bomberos regionales.
No se ha informado de heridos en la zona costera que atrae a miles de turistas cada verano, pero 16 casas fueron destruidas o dañadas cerca del pueblo de Belin-Beliet.
La prefectura advirtió que el fuego se dirigía hacia la autopista A63, que conecta con España, y el humo forzó el cierre de un tramo entre Burdeos y Bayona.
Europa enfrenta olas de calor extremo
Francia, al igual que el resto de Europa, está haciendo frente a olas de calor extremo con temperaturas por encima de los 40 grados y a sequías que han provocado múltiples incendios forestales en todo el continente en los últimos dos meses.
Este incendio en las Landas es el último de una serie que ha arrasado este año el sudoeste de Francia, afectado por una inédita sequía y varias olas de calor.
Las autoridades sospecharon en un principio que el fuego en las Landas tuvo un origen criminal. Pero la policía dejó en libertad a un sospechoso por falta de evidencia.
#Gironde | Dans le retour de l’enfer.
— Pompiers de France (@PompiersFR) August 9, 2022
Prudence et courage à tous les « soldats du climat ». pic.twitter.com/ymgicp0Q8P
Unos 500 bomberos trabajaban en el lugar, apoyados por aviones hidrantes.
En el oeste de Francia, un incendio forestal cerca de Angers y Le Mans ha destruido 1,200 hectáreas desde el lunes y actualmente unos 400 bomberos luchan por sofocarlo.
La Gironda, en el suroeste de Francia, se vio afectada en julio por dos incendios forestales que destruyeron más de 20,000 hectáreas de bosque y provocaron la evacuación de casi 40,000 personas.