¡Impuestos y más impuestos! Los mexicanos pagan por todo; desde el súper hasta por trabajar

Pagamos demasiados impuestos porque hay impuestos para todo, son muchos, pero lo que si no sabemos es si los ocupan para lo que tiene que ser. Así es, los mexicanos pagamos impuestos por todo, por trabajar, por ir al súper, por viajar; incluso, por divertirse, vamos a empezar primero por el impuesto al trabajo.

Pagar por trabajar, eso es el impuesto sobre la renta, el ISR, se paga dependiendo de cuánto gana; va desde el 8 por ciento y hasta el 35 por ciento de los ingresos. Por ejemplo, si gana 20 mil pesos al mes, le quitarán 2 mil 604 pesos, así, entre más trabaja, más paga. Y si decide dar trabajo a la gente, usted pagará un impuesto sobre la nómina que va del 2 al 4 por ciento.

“Que se fijen bien a quiénes están impactando más los impuestos, porque no todos tenemos los mismos ingresos”, explicó una contribuyente.

Seguimos ahora con las compras. No se trata de amargar las visitas al supermercado, pero aquí por todo va a pagar el famoso Impuesto al Valor Agregado, el IVA. Incluso si se compra sus botanitas le van a tener que sablear su 16 por ciento.

Supongamos que compra una despensa básica de mil pesos, 160 pesos irán exclusivamente al IVA. Y si después del súper va a cargar gasolina, lo van a recibir los impuestos especiales, los famosos IEPS (Impuesto Especial sobre Producción y Servicios); por ejemplo, en la magna, por cada litro que usted carga, son 6.17 pesos, si llena su tanque son 308 pesos que tendrá que pagar de este impuesto especial.

Y no crea que por pagar su IEPS se va a salvar del IVA, son 157 pesotes; juntos los dos impuestos son más del 40 por ciento del pago.

Si le seguimos acumulando, hasta por las vacaciones se cobran impuestos. En el hospedaje se pagan dos, si va a comer, paga el IVA, y si piensa surcar los aires los aviones también le va a costar unos impuestos, por ejemplo la tarifa de uso aeroportuario son 504 pesos nada más en este aeropuerto de Guadalajara, es decir el 30 por ciento, se le va a ir a pagar ese impuesto.

Y ya no le seguimos con los impuestos, pues si se hospitaliza, si manda a escuela privada a sus hijos, si usa taxis de aplicación, si va a divertirse o si va a comer, tendrá que pagar.

¿Al final todo eso se lo devuelven con creces?

“Se usan mal, se hacen obras que se quedan a la mitad y que son pagadas con los impuestos”, añadió otra contribuyente.

“Deben de utilizarse mejor y una mejor asignación del presupuesto en las necesidades primordiales”, sentenció otro contribuyente.