¡Devastación por “John”! El pasado lunes 23 de septiembre, un huracán de categoría 3 impactó en las costas de Guerrero, provocando graves daños materiales y pérdidas humanas. Este fenómeno meteorológico, que tocó tierra cerca de Acapulco, desató lluvias torrenciales que resultaron en inundaciones masivas, deslaves y la destrucción de infraestructuras en diversas localidades, lo que ha llevado a las autoridades a tomar medidas preventivas para proteger a la población.
¡Sin clases! Guerrero suspenden actividades tras impacto de “John”
Ante el panorama desolador que azota a Guerrero, la Secretaría de Educación anunció la suspensión de clases en todas las escuelas públicas y privadas del estado para el lunes 30 de septiembre. Esta medida afecta a una matrícula escolar de más de un millón de estudiantes en diversos niveles educativos. La decisión se basa en la evaluación continua del impacto del huracán, así como en las recomendaciones del Consejo Estatal de Protección Civil.
La suspensión de actividades educativas no solo busca salvar la integridad física de los estudiantes y docentes, sino que también refleja la gravedad de la situación en Guerrero . Las autoridades educativas han instalado a la comunidad a mantenerse informada a través de los canales oficiales del gobierno estatal y la Secretaría de Educación para recibir actualizaciones sobre el regreso a clases y cualquier otra medida relacionada con la emergencia.
Viviendas bajo el agua por “John” en Acapulco, Guerrero
Tras el impacto de “John” , los poblados de El Arenal y Candelilla han sido gravemente afectados por el desbordamiento de la laguna de Tres Palos, lo que ha dejado a muchas familias atrapadas y sin acceso a servicios básicos.
La comunidad de El Arenal se ha enfrentado a una de las peores crisis, ya que las inundaciones han cubierto completamente calles, hogares y negocios. En algunas áreas, el agua ha alcanzado más de dos metros de altura, complicando aún más la situación. Además, la escuela primaria cercana, que estaba destinada a servir como refugio para los damnificados.
