¿Alguna vez has sentido como si tus pies se ‘quedaran dormidos’? La sensación de hormigueo y entumecimiento es más común de lo que pensamos y podría estar revelando más de lo que crees. Descubre las sorprendentes causas detrás de este problema y cómo controlar sus efectos.
¿Qué causa el adormecimiento de los pies?
De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el adormecimiento de los pies, también conocido como
parestesia
, es una sensación frecuente que puede tener diversas causas, como:
- Mantener una postura prolongada, como cruzar las piernas o estar sentado durante horas, puede comprimir los nervios y causar adormecimiento.
- Enfermedad arterial periférica por una afección en la que las arterias se estrechan, reduciendo el flujo sanguíneo a las piernas y los pies.
- Diabetes, ya que los altos niveles de azúcar en la sangre pueden dañar los nervios y los vasos sanguíneos, causando adormecimiento.
- Deficiencias nutricionales, como la falta de ciertas vitaminas, como las del complejo B, puede afectar los nervios.
Alejandro Díaz Borjón, académico de la Facultad de Medicina de la UNAM, explicó que el adormecimiento puede darse en cualquier extremidad, desde los pies, las piernas, los codos, las manos hasta los hombros.
¿Qué la causa? Díaz Borjón detalló que dentro del organismo existe el sistema nervioso conformado por el central y periférico, ambos conectados con el cerebro. Muy parecido a un cable de luz que transmite electricidad mediante neurotransmisores, es decir, información de una neurona a otra. El especialista añadió que al presentarse la sensación de hormigueo, el nervio mediano que da sensibilidad a gran parte de la mano (por lo menos de tres dedos) sufre una flexión excesiva y se da una interrupción en el impulso nervioso, y el cerebro lo traduce como adormecimiento.
¿Cómo quitar el hormigueo rápido?
Aunque el
hormigueo
suele ser una sensación temporal que desaparece por sí sola, existen algunas medidas que puedes tomar para aliviar rápidamente esta molestia, como:
- Cambiar de posición y mover el pie o la pierna afectada.
- Masajear suavemente la zona adormecida para estimular la circulación.
- Aplicar calor o frío para relajar los músculos y reducir la inflamación.
- Elevar el pie o la pierna por encima del nivel del corazón.
¡Tómalo en cuenta! Si el hormigueo persiste, empeora con el tiempo o se acompaña de otros síntomas como dolor, debilidad muscular o pérdida de sensibilidad, es importante consultar a un médico.
