En el municipio de Salvador Alvarado, Sinaloa , durante la noche del domingo 28 de julio y la madrugada del lunes 29 de julio, se registró una persecución policial que terminó con una tragedia, después de que un sospechoso de asesinato, tras verse acorralado por las autoridades, decidió ingresar y replegarse en un domicilio donde, tras tomar de rehenes a una familia, y a pesar de un intento de negociación, decidió matarlos y posteriormente quitarse la vida.
¿Cómo sucedió esta tragedia?
De acuerdo a datos preliminares compartidos por las autoridades, este crimen se registró en Guamúchil, cabecera municipal de Salvador Alvarado, después de que el homicida, identificado como José ‘N’, perpetró un primer asesinato en un domicilio ubicado sobre la calle Rodolfo Sánchez Taboada, entre Francisco Villa y Salvador Alvarado en la colonia Juárez. En esa dirección, la víctima, identificada como Jaciel Iram ‘N’, de 45 años, murió por impactos de bala.
Luego de cometer este delito, la Policía Municipal de Salvador Alvarado fue advertida del ataque que se había cometido, por lo que durante un patrullaje de la zona, lograron confirmar que José ‘N’ se había escondido de la justicia en un domicilio por la Avenida Matamoros, entre las calles Agustín Melgar y Juan de la Barrera. La operación por parte de las autoridades pasó de una persecución, a un rescate, pues en la casa que decidió atrincherarse, el delincuente tomó de rehenes a una familia.
Tras informarse de la actualidad del acontecimiento, al operativo se unieron la Policía Estatal y la Guardia Nacional, durante el intento de rescate, un uniformado que intentaba negociar, resultó herido por un proyectil en una mano, por lo que tuvo que ser trasladado a una clínica para que se valorara su situación.
Luego de varios intentos de negociación, el criminal perdió la cordura y, en medio de la situación, decidió asesinar a sus rehenes con un arma de fuego, para, posteriormente, quitarse la vida.
Los integrantes de la familia que murieron fueron identificados como Rubén y Felicitas, padre y madre, y Diana Paulina, la hija de ambos.
Sara Bruna Quiñonez Estrada, Fiscal General del Estado de Sinaloa, informó que tras el asesinato y el suicidio se abrió una carpeta de investigación por homicidio doloso.
