En un extraño caso médico que se registró en un hospital de Siria, un hombre de 20 años acudió al médico debido a que presentaba una secreción nasal , pero después de que le realizaran estudios descubrió que se trataba de una fuga de líquido cerebral.
El caso fue conocido debido a un artículo publicado a principios de septiembre en la revista Journal of Medical Case Reports y que detalla cómo el joven sirio se presentó con la queja de escurrimiento de un líquido amarillo en su fosa nasal derecha que comenzó hace 6 años después de un traumatismo craneoencefálico, así como de sufrir dolores de cabeza y episodios de convulsiones.
Traumatic encephalocele in the nasal cavity after 6 years of trauma: a case report https://t.co/Krjt0ccbmq
— Journal of Medical Case Reports (@jmedcasereports) September 10, 2024
El historial clínico reveló la causa de todo
Ante el extraño caso, los médicos revisaron su historial clínico, que reveló que el paciente sufrió una fuga de líquido cefalorraquídeo (LCR) hace 6 años después de un accidente automovilístico del que salió consciente y receptivo y sin ninguna lesión adicional aparente. Fue así que el paciente decidió no seguir ningún tratamiento y fue dado de alta bajo su propia responsabilidad.
Después de un tiempo comenzó a sufrir dolores de cabeza persistentes y convulsiones que habían aumentado a pesar de someterse a tratamiento médico. Sin embargo, fue apenas hace 2 meses que el paciente tuvo una meningoencefalitis, una inflamación que afecta al cerebro y a las meninges, las membranas que lo recubren, por lo que ingresó en la unidad de cuidados intensivos y fue tratado durante un mes hasta curarse parcialmente.
Paciente rechazó cirugía a pesar del diagnóstico
Cuando al paciente le realizaron una tomografía computarizada (TC) y una resonancia magnética (RM), los resultados mostraron que tenía una fractura de base con encefalocele en la cavidad nasal, que es una protrusión, parecida a un saco, del cerebro y las membranas que lo recubren a través de una abertura en el cráneo. Por esta razón, los médicos le aconsejaron realizar una operación quirúrgica en ese momento, pero el paciente rechazó la cirugía .
Aceptó la cirugía tras continuar con los malestares
Dos meses después, cuando el paciente acudió de nuevo a consulta por los mismos malestares, la resonancia magnética cerebral arrojó los mismos resultados, por lo que se volvió a indicar la cirugía. Esta vez el hombre sirio de 20 años no mostró objeción en someterse a la operación.
La cirugía la realizó un especialista en neurocirugía que devolvió los tejidos cerebrales herniados a su ubicación normal, reparó las meninges y reconstruyó la base del cráneo con cemento óseo y biopegamento. Después de esto, la recuperación transcurrió sin incidentes y fue dado de alta del hospital después de 2 días.
Posteriormente, el examen físico del paciente reveló que la rinorrea del LCR, el dolor de cabeza y las convulsiones desaparecieron, y la resonancia magnética mostró una reparación completa del encefalocele, la expansión de los espacios subaracnoideos en el hemisferio derecho desapareció y el cerebro volvió a su tamaño normal
