Un operativo marítimo en el Pacífico mexicano dio como resultado un aseguramiento de drogas histórico. La cantidad de droga incautada supera cualquier registro anterior. ¿Qué más se esconde detrás de este megaoperativo?
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Reportan el más grande aseguramiento de droga en una operación marítima con 8.3 toneladas de presunta droga y la detención de 23 probables delincuentes, en seis embarcaciones menores, en costas de Lázaro Cárdenas Michoacán.
La Semar señala que se trata del decomiso más grande realizado en el mar, en la historia de la institución. Además detuvieron a 23 personas.
La Marina capturó a 23 presuntos narcotraficantes
La Secretaría de Marina a través de la Armada de México informó que, en días pasados, decomisaron cerca de 8 mil 361 kilogramos de carga ilícita y 8 mil 700 litros de combustible; asimismo, fueron detenidos 23 presuntos delincuentes y aseguraron 6 embarcaciones.
Esto fue gracias a patrullajes de vigilancia marítima y con el apoyo de un helicóptero Panther de la Armada de México. La primera flota tenía 8 tripulantes, quienes arrojaron la droga al mar al ver a las autoridades.
En total se recuperaron 94 bultos con un peso de 2 mil 105 kilogramos, así como 38 bidones con un volumen estimado de 1 mil 250 litros.
Droga asegurada equivale a $2 mil 099 millones de pesos
En una segunda embarcación encontraron a 3 personas con 125 bidones con un volumen aproximado de 5 mil 950 litros de combustible y se lograron recuperar 49 bultos abandonados con un peso aproximado de 1 mil 102 kilogramos de droga.
En la tercera embarcación en las costas de Guerrero, hallaron 40 bultos de presunta carga ilícita, con un peso aproximado de 1 mil 200 kilogramos y 24 bidones con un total aproximado de 400 litros de combustible.
La cuarta embarcación fue asegurada con 93 bultos de droga con un peso aproximado de 2 mil 179 kilogramos, así como bidones con combustible. Finalmente, la quinta y sexta embarcaciones fueron aseguradas, con seis tripulantes a bordo, 75 bultos con un peso aproximado de 1 mil 774 kilogramos y 950 litros de combustible.
Esto representa una pérdida de $2 mil 099 millones de pesos mexicanos para el crímen organizado.
