Un macabro descubrimiento tuvo lugar este miércoles 14 de agosto en Ciudad Juárez, Chihuahua, dónde fueron localizadas cajas negras con tortugas muertas. Las autoridades locales investigan su procedencia.
Autoridades pensaron que las cajas contenían cuerpos humanos
De acuerdo con los primeros reportes, los uniformados encontraron estas cajas en el cruce de las calles Juan Pablo II y Antonio J. Bermúdez. En un inicio, los agentes se aproximaron para comprobar que no se tratara de restos humanos por el olor fétido que desprendía, pero al abrir una, vieron que había una tortuga adulta de gran tamaño sin vida.
Por este motivo, contactaron al personal de la Fiscalía General del Estado de Chihuahua para comenzar las investigaciones y descubrir quién las dejó sobre la vía pública.
Cabe señalar que el reporte generó una intensa movilización que incluyó el sobrevuelo de un helicóptero.
Aseguraron 17 tortugas gigantes en avanzado estado de descomposición
En total, las autoridades contabilizaron 17 cajas de plástico; todas tenían tortugas gigantes muertas cubiertas de cal.
De igual forma, agentes de Bienestar Animal realizaron la necropsia a los animales para determinar la causa de muerte; sin embargo, debido al avanzado estado de descomposición de los cuerpos, no fue posible saber el motivo y procedieron a enviarlos a un relleno sanitario.
“Esta misma tarde las tortugas fueron depositadas en el relleno, es un residuo orgánico y se dio vista a la Sagarpa, pues es la autoridad competente en caso de alguna investigación y es nuestra obligación dar vista cuando, se trata de un animal de agua y también dimos aviso a la Fiscalía”, indicó César René Díaz, director de Ecología Municipal.
Hasta 9 años de cárcel por matar tortugas en México
Asimismo, las autoridades revelaron que las tortugas eran de la especie caimán y aclararon que revisarán las cámaras de seguridad de la zona para determinar cuándo y quién las depositó sobre la vía pública.
Según el Artículo 420 del Código Penal Federal, aquellos que capturen, dañen o asesinen a una tortuga, mamífero marino o sus crías, podría recibir de 1 a 9 años de cárcel, así como una multa que va de 32 mil 571 a 325 mil 710 pesos mexicanos.
