Guardia Nacional abandona combate a la inseguridad que vive México
La Guardia Nacional abandonó el combate a la inseguridad en México, para darle prioridad a una irrupción ilegal en el campo de golf Tangolunda, en Huatulco.
Para nadie es un secreto que México tiene altos niveles de violencia, de hecho, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública INEGI 2023, el 60% de los mexicanos considera que la inseguridad es el problema más importante de nuestro país, pero ¿qué pasa cuando las autoridades no hacen su trabajo?
Por ejemplo, las instituciones que deberían garantizar que todos los mexicanos podamos vivir en paz están ocupadas en tareas que no les corresponden, como por ejemplo la Guardia Nacional, que ahora se usa para asegurar ilegalmente un campo de golf .
“¿Qué es más importante para el Estado? Evidentemente la vida de las personas, los derechos de la sociedad en general, como en este caso desaparecidos, niñas, feminicidios. Entonces es evidente que no está justificado que se desperdicien recursos humanos y materiales en fines meramente políticos.”, señala Karen Abigail Blancas, abogada litigante.
Gobierno Federal continúa desviando la mirada de asuntos verdaderamente preocupantes
De acuerdo con los especialistas, la Guardia Nacional debería velar por la paz y la tranquilidad de todos los mexicanos, algo que hoy simplemente no ocurre.
“El país está convulsionado, el país está en conflictos muy graves. Me parece que la Guardia Nacional no ha atendido el tema del crimen organizado que hoy no solo controla sino que dirige grandes extensiones del territorio nacional. Es ahí donde nos ha fallado la Guardia Nacional.”, agrega José Gil García, abogado especialista en seguridad pública.
Y seguirá fallando mientras el Gobierno Federal continue desviando la mirada de los asuntos que verdaderamente preocupan a los mexicanos.
¿Qué está pasando en el campo de golf en Huatulco?
Cabe señalar que la irrupción ilegal por parte de la Guardia Nacional al campo de golf Tangolunda, ubicado en Santa María Huatulco, en Oaxaca, provocó daños en las instalaciones y al trabajo de los que viven de las actividades deportivas.
El 15 de agosto de 2012, Producciones Especializadas, S.A. de C.V. (PES) y Fonatur cerraron un contrato que establecía la prestación de servicios del campo, en el cual el PES se comprometía a entregar un porcentaje de los ingresos del club.
Dicho contrato tenía una vigencia de 10 años, pero con opción de dos prórrogas de cinco años cada una; sin embargo, Fonatur desconoció este acuerdo.