La grasas trans o también conocidas como ácidos grasos trans son consideradas como el peor tipo de grasa que se puede consumir ya que afectan a la salud en gran medida, pero qué son exactamente y en qué alimentos se encuentran.
Las grasas trans son un tipo de grasa comestible creada tras un proceso industrial en el que se añade hidrógeno al aceite vegetal , lo que hace que el aceite se vuelva sólido a una temperatura ambiente.
Estas grasas trans son utilizadas para alterar el sabor y la consistencia de los productos, con el fin de que se mantenga estable su sabor durante largos periodos de tiempo y evitar que se echen a perder, detalló la Secretaría de Salud.
Las grasas trans provienen de procesos artificiales y se encuentran en muchísimos productos que consumimos con frecuencia como alimentos fritos, empacados o procesados, es decir en:
- Pasteles
- Galletas dulces
- Tartas
- Manteca vegetal
- Palomitas para microondas
- Pizza congelada
- Papas fritas
- Margarina
¿Por qué las grasas trans afectan a la salud?
El consumo de las grasas trans aumentan los niveles de colesterol “malo” y, además, reducen la cantidad del colesterol “bueno”, por lo que se consideran el peor tipo de grasa que se puede comer.
- El colesterol “malo” puede acumularse en las paredes de las arterias, lo que hace que se endurezcan y se estrechen.
- El colesterol “bueno”, regulan y evitan el exceso de colesterol, además se encargan de llevarlo de nuevo al hígado.
Dado a que el consumo prolongado de las grasas trans tapan las arterias, se eleva el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas, las cuales son una de las principales causas de muerte en el mundo. o un accidente cerebrovascular.
Para contrarrestar los efectos de los ácidos grasos trans, se recoienda consumir productos lácteos bajos en grasa, aumentar el consumo de pescado, cocinar con aceites líquidos y pausar por un tiempo la ingesta de alimentos con grasas trans.
¿Qué grasas se pueden consumir?
Los especialistas del sector salud, detallan que las grasas son un tipo de nutrimento esencial para el organismo, dan al cuerpo energía, ayudan a mantener la piel y el cabello saludables y absorben las vitaminas.
Según la Secretaría de Salud hay grasas “buenas” para la salud, monoinsaturadas y poliinsaturadas, e incluso son esenciales porque el cuerpo no es capaz de producirlas y deben aportarse a través de la alimentación de salmón, sardinas, atún, aceite de oliva, canola, cártamo, girasol, maíz y soya.