El pasado 1° de abril de 2022, la FIFA organizó un nuevo sorteo para determinar los grupos del Mundial de Qatar, donde por azares del destino, la fortuna hizo que en el Grupo B coincidieran dos países con un conflictivo pasado político: Estados Unidos vs. Irán, dos selecciones que 22 años antes protagonizaron uno de los partidos más politizados de la historia.
El compromiso ocurrió en la Copa del Mundo de Francia 1998, cuando el conflicto político y militar se encontraba muy presente en las dos naciones, por lo que desde que el sorteo arrojó a los dos equipos sembrados en el Grupo F, un mar de provocaciones empezó a circular desde los nichos más dolidos por el conflicto de EU vs. Irán.
Cuando se confirmó la presencia de las dos selecciones en el mismo grupo, el entonces presidente de la FIFA, Joseph Blatter, hizo un gesto de rechazo que representó como nunca lo politizado que iba a resultar el partido.

¿Cómo surge el conflicto de Irán con Estados Unidos?
Luego de la Revolución Islámica en 1979 al interior de Irán y contra el líder Mohammad Reza Pahlavi, ascendió la figura del ayatolá Jomeini, quien solicitó sin éxito la extradición de Shah Mohammad Reza Pahlavi, exiliado en Estados Unidos, algo que no fue aceptado por el gobierno norteamericano y provocó el suceso que detonó el gran conflicto entre las dos naciones.
Llamado popularmente como “La crisis de los rehenes”, a finales de 1979 un gran sector de la población iraní explotó contra la respuesta de Estados Unidos con el proceso de extradición, por lo que un grupo de estudiantes capturaron a 66 personas trabajadoras de la embajada norteamericana en Teherán durante 444 días y se rompieron las relaciones entre Estados Unidos e Irán.
Debido a que uno de los principales fundamentos del líder revolucionario iraní era terminar con la injerencia de Estados Unidos sobre su tierra durante la gestión anterior, la tensión entre las dos naciones no hizo más que crecer.
Estados Unidos vs. Irán en el Mundial de Francia 1998:
Como era de esperarse, desde la visión iraní Estados Unidos había actuado como un eje opresor de su nación, por lo que Khodadad Azizi, delantero estrella de Irán en aquel Mundial de 1998, dijo unas palabras que causaron eco y calentaron un encuentro marcado por los problemas del pasado:
“EU nos impuso una guerra de ocho años con Irak que costó la vida de medio millón de iraníes. Hay muchas familias de mártires deseando que ganemos. Tenemos esa obligación, es el partido de nuestras vidas”, expresó el ariete de acuerdo con El Diario de España, en una clara muestra del gran significado que tenía el compromiso.
Irán prohibió visitas de las delegaciones estadounidenses para estudiar a su selección de futbol y viceversa, incluso en Estados Unidos fueron retenidos en aduana dos miembros del cuerpo técnico de la selección iraní que ingresaron disfrazados a territorio nortemaericano.
Mientras tanto, distintos medios en el mundo incendiaron aún más el partido con recapitulaciones y representaciones del conflicto político, por lo que llegó un momento en el que el profesionalismo deportivo y la paz dio un paso adelante entre los protagonistas.
Los flores de Irán a Estados Unidos en 1998:
En medio de las provocaciones e indignaciones desde Irán hacia Estados Unidos, que incluso involucraron la negativa de jugar en “condición de visitante” como indicó el sorteo, lo cual hubiera provocado salir al campo después del equipo occidental, el presidente Bill Clinton salió a la luz y, además de animar a su selección, destacó el valor de la FIFA por unir a dos naciones políticamente distantes.
Con el Mundial de Francia 98 a la vuelta de la esquina, jugadores de las dos selecciones le pusieron cordura al enfrentamiento y empezaron a propagar la línea de que era simplemente un partido de futbol, por lo que dejaron los discursos políticos a un lado.
Llegó el día del partido en la ciudad de Lyon y como símbolo histórico, la selección de Irán salió con flores para los jugadores estadounidenses e intentaron propagar la paz. Se fotografiaron juntos y comenzó un partido marcado por la previa más tensa en un Mundial.
Irán derrotó 2-1 a Estados Unidos y es imposible negar que se festejó a lo grande más allá del fútbol, pues incluso el líder supremo Ali Jamenei, expresó aquella noche que habían hecho probar la derrota de un enemigo “grande y arrogante”.
La declaración no transgredió al fútbol y se mantuvo la paz, al grado de acordar un partido amistoso entre las dos selecciones un año después sobre territorio estadounidense; sin embargo, el compromiso de 1998 quedó marcado como el juego de futbol más politizado en la historia de los Mundiales.
El próximo 29 de noviembre de 2022, el Mundial de Qatar volverá a reunir a las dos selecciones con el probable pase a los octavos de final en juego, un compromiso que reúne polémica, política y un nacionalismo que, una vez más, quedará escudado en la pasión por el deporte.