Estados Unidos anuncia una ambiciosa iniciativa para impulsar la industria de microprocesadores en Latinoamérica
La guerra de los microprocesadores estaría por comenzar, pues EU quiere reducir su dependencia estratégica de Asia respecto a este tipo de tecnología.
En una histórica movida, el gobierno del presidente Joe Biden ha anunciado oficialmente que Estados Unidos está dispuesto a financiar la instalación de fábricas de manufactura, empaquetado y aplicación de microprocesadores en Latinoamérica. Esta medida es la mayor iniciativa del país hacia la región en la actualidad.
El Secretario de Estado, Antony Blinken, declaró: “gracias al financiamiento bipartidista de la Ley de Chips, esta iniciativa impulsará la capacidad de los países para ensamblar, probar y empaquetar semiconductores, comenzando por México, Panamá y Costa Rica.”
China y Taiwán lideran el mercado de microprocesadores en la actualidad
Actualmente, la mayor base de microprocesadores se encuentra en China y Taiwán. Estados Unidos busca reducir su dependencia estratégica de Asia , trasladando la producción a países socios más cercanos. Esta estrategia no solo garantiza la estabilidad del suministro de esta tecnología crítica, sino que también fortalece la cooperación con sus vecinos.
Blinken también anunció que Estados Unidos organizará un simposio en México en septiembre, luego del éxito de una conferencia en Costa Rica en enero. Este evento tiene como objetivo identificar formas en que la región puede desempeñar un papel más importante en la cadena de suministro global de microprocesadores.
Los industriales subrayan la importancia de controlar los bienes físicos de producción para mantener una economía robusta y con buenos sueldos. Promover la industria estadounidense asegura el bienestar de México y sus socios, según estos expertos.
¿Qué dice México sobre la industria de los microprocesadores?
La canciller mexicana, Alicia Bárcena, comentó: “Estados Unidos ya nos está ayudando a realizar algunas de las acciones que estamos tomando. Y también estamos tomando medidas nosotros mismos, junto con los gobiernos de la región.”
Este proyecto, aprobado por el Senado, incluye nuevos incentivos gubernamentales para las industrias que inviertan en energía limpia y productos como los semiconductores. Es así que el próximo desafío será traer las cadenas de producción más cerca de Estados Unidos, lo que creará más empleos y fortalecerá la economía regional.
Esta ambiciosa iniciativa promete transformar la industria de los semiconductores en Latinoamérica, fortaleciendo la cooperación regional y asegurando la competitividad tecnológica de Estados Unidos.
