Ante los bajos niveles de la presa de Valle de Bravo , los habitantes del municipio mexiquense ven con impotencia como la cuenca está perdiendo agua de manera alarmante sin que ninguna autoridad parezca tener una solución efectiva.
De acuerdo con los pobladores del municipio de Valle de Bravo, la presa se encuentra agonizando a niveles nunca antes vistos, así lo relata José Erasto Santana García, quien a sus 91 años, asegura que jamás había presenciado estos niveles de sequía: “Da coraje, da coraje porque el agua ya está muy abajo y en toda mi vida no había visto yo el agua así".
¿Por qué se creó la presa de Valle de Bravo?
Don Erasto describe con nostalgia el día que nació la presa “Miguel Alemán” de Valle de Bravo, en 1947, por obra de la Comisión Federal de Electricidad, como parte del Sistema Hidroeléctrico “Miguel Alemán”. Según dijo, en aquel entonces ‘todavía ni carretera había… el recuerdo era que estaba la Laguna llena, la presa pues’.
¡Alarmante! Desde 1982, la presa forma parte del Sistema Cutzamala , encargado de llevar una cuarta parte del agua que se consume en 13 de las 16 alcaldías de la Ciudad de México y en 13 municipios del Estado de México, conformado por tres presas principales con el fin de dotar agua al Valle de México.
Lamentablemente, a 76 años de su construcción nadie se explica el porqué de los niveles tan bajos que ha presentado la presa durante los últimos meses.
¿Qué nivel tiene la presa de Valle de Bravo?
En septiembre de 2023, los niveles de la presa de Valle de Bravo se encuentran a menos del 35% de su capacidad y de acuerdo con especialistas este número podría continuar a la baja debido a la sobreexplotación de la cuenca.
David Pérez Osorio, presidente del Frente de Acción Ciudadana de Valle de Bravo, indicó que “se empieza a llevar más agua de la que capta el vaso, ese es el principal problema, que se le está sacando más líquido del que está ingresando a la presa”.
Además, se está consumiendo agua como si las condiciones hidrológicas fueran normales, y no lo son, afirma Carlos Díaz Delgado, coordinador de Proyectos del Instituto de Tecnología y Ciencias del Agua de la Universidad Autónoma del Estado de México: “Ha llovido por debajo de las condiciones normales en la región”.
A la escasez de lluvia, hay que sumarle la tala indiscriminada de árboles, la desaparición del glaciar en el Nevado de Toluca, la colocación de lagos privados y jardines en residencias vecinas, que consumen mucha agua, entre otros factores que están acabando con la presa.
Como una forma de “inyectarle vida al Valle” del Estado de México, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) comenzó la transferencia de agua de la presa El Bosque, localizada en Michoacán para iniciar con el rescate de la cuenca.