La Estación Espacial Internacional (EEI), ha representado la colaboración internacional en el espacio durante más de dos décadas, podría estar enfrentando un desafío inesperado. Elon Musk, asesor del presidente de Estados Unidos y fundador de Space X quiere poner fin a la EEI y redirigir todos los esfuerzos hacia la colonización de Marte.
El compromiso internacional y la visión de Musk
Los países miembros del programa de la EEI, incluyendo Estados Unidos, Rusia, Europa, Japón y Canadá, han acordado mantener la estación en funcionamiento hasta al menos 2030.
Este compromiso implica una inversión continua en mantenimiento, actualizaciones y experimentos científicos en microgravedad.
It is time to begin preparations for deorbiting the @Space_Station.
— Elon Musk (@elonmusk) February 20, 2025
It has served its purpose. There is very little incremental utility.
Let’s go to Mars.
La NASA, por ejemplo, ha expresado su intención de eventualmente transferir la gestión de la órbita baja terrestre a empresas privadas, mientras se enfoca en misiones a la Luna y Marte a través del programa Artemis.
En recientes declaraciones, Musk ha argumentado que la EEI “ha cumplido su función” y que es hora de “pasar página” y concentrar todos los recursos en la exploración y colonización de Marte.
¿Obsolescencia programada o un salto necesario?
Algunos expertos argumentan que la EEI todavía tiene un valor científico significativo. Los experimentos realizados en la estación han contribuido a avances en medicina, biología, física y ciencia de materiales, con aplicaciones tanto en el espacio como en la Tierra.
Además, la EEI sirve como un banco de pruebas para tecnologías que serán cruciales para futuras misiones de larga duración.
Por otro lado, los partidarios de la visión de Musk señalan que mantener la EEI operativa requiere una enorme inversión de recursos que podrían utilizarse de manera más eficiente en el desarrollo de tecnologías para la exploración interplanetaria.
Futuro de la cooperación internacional en el espacio
La propuesta de Musk plantea interrogantes importantes sobre el futuro de la cooperación internacional en el espacio, el papel de las empresas privadas en la exploración espacial y la asignación de recursos limitados.
¿Podría la retirada de un actor clave como Estados Unidos (impulsada por la influencia de Musk) desestabilizar la colaboración internacional en la EEI?
Carlos Slim apuesta US$ 1 a que Musk no llegará a Marte en 2028https://t.co/TX5fQlFyJc
— CNN en Español (@CNNEE) February 11, 2025