Lisa-Maria Kellermayr, una doctora de 36 años de edad, se suicidó debido al bullying del que fue víctima durante siete meses por un grupo de antivacunas, luego de que ella defendiera la inmunización contra el Covid-19 en Austria.
De acuerdo con las autoridades, la doctora fue hallada sin vida la semana pasada en su consultorio en Wels, al oeste de Austria, en el lugar también encontraron tres notas, cuyo contenido no dieron a conocer, pero que informaron que se trataban de mensajes suicidas.
La policía de Austria dijo que no se hará autopsia al cuerpo de la doctora porque aseguraron que se trató de un suicido. El caso conmocionó a la ciudadanía e iniciaron una ola de protestas y manifestaciones para exigir justicia.
Tras darse a conocer el caso de la doctora, los habitantes de Austria exigieron a las autoridades que endurezcan las leyes contra el acoso y el bullying , incluso para perpetradores en otros países de la Unión Europea, ello porque los acosadores de Lisa-Maria provenían de Alemania.
Aktueller Stand der Dinge:
— Dr. Lisa-Maria Kellermayr (@drlisamaria) July 1, 2022
Nachdem sich @n3ll41 eingebracht hat haben die Ermittlungen gewaltige Fortschritte gemacht. Aber weder haben wir den Täter noch wird der wenn wir ihn einmal haben so schnell angeklagt oder gar verhaftet. Das wird Wochen und Monate in Anspruch nehmen.
Doctora sufre acoso por antivacunas en Austria
De acuerdo con medios locales, el acoso contra la doctora comenzó en noviembre de 2021 con una manifestación frente al hospital de Wels. La médica compartió en su cuenta de Twitter que una manifestación bloqueó la entrada y salida al hospital de las ambulancias.
Horas más tarde, la policía desmintió dicha información y acusó a la doctora de publicar información falsa. De ahí, una avalancha de insultos comenzaron a llegarle por mensaje a Kellermayr, los cuales después se convirtieron en amenazas y finalmente en agresión física.
Meses después, un grupo de antivacunas entró a su consultorio y difundió fotos de ella, sus empleados y pacientes a través de telegram. La doctora denunció, pero no recibió respuesta de las autoridades de Austria.
Finalmente, en junio, la doctora cerró su consultorio, pues los últimos seis meses se volvieron una pesadilla para ella, al grado que prefirió quitarse la vida por el
bullying
que recibió.