¿Qué leyes protegen a los usuarios que dependen de perros guía para su movilidad?

Los perros guía no son solo mascotas, son considerados los ojos de las personas con discapacidad visual, quienes sufren de discriminación por esto.

Por: Ulises Grajales Valdivia

La discriminación hacia personas con discapacidad visual que utilizan perros guía es un problema importante. Recientemente, un caso en Xalapa, Veracruz, ha llamado la atención: Miguel Ángel Hernández Correa fue expulsado de un restaurante por llevar a su perro guía.

El gerente argumetó que las “políticas de la empresa” no permitían la entrada de mascotas; sin embargo, este incidente no es aislado; muchos usuarios de perros guía enfrentan situaciones similares en diversos establecimientos y transportes públicos en el país.

Según testimonios, la discriminación se manifiesta no solo en restaurantes, sino también en escuelas, hospitales y museos. La falta de comprensión por parte del público y del personal de servicio ocasiona un ambiente hostil para quienes dependen de los perros guía para su movilidad.

¿Qué leyes protegen a los usuarios que dependen de perros guía para su movilidad en México?

A pesar de que existen leyes locales , estatales y federales que protegen a los usuarios de perros guía, muchas personas aún ignoran estas normativas. Por ejemplo, el artículo 58 de la Ley Federal del Consumidor establece que ningún proveedor de bienes y servicios puede negar el acceso a los usuarios de perros guía.

Además, la Ley General para la Inclusión de las Personas con Discapacidad garantiza el derecho a acceder a cualquier establecimiento o servicio acompañado por un perro guía.

¿Cuál es la importancia del perro guía?

Los perros guía son entrenados durante aproximadamente dos años para desempeñar su función como asistentes. Este entrenamiento continúa a lo largo de su vida útil, que suele ser hasta los diez años. Los perritos no son simples mascotas; son consideradas como apoyo que proporcionan autonomía e independencia a sus dueños al ayudarles a evitar obstáculos y navegar por su entorno.

Separar al usuario de su perro guía significa privarlo de su “visión” y seguridad.

Las víctimas de discriminación tienen el derecho de presentar quejas ante organismos como la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) o el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (COnapred).

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