¡Date cuenta! Mamá Gobierno: La empresa fracasada
El gobierno debería enfocarse en sus responsabilidades principales, como la seguridad pública y otros servicios esenciales, en lugar de intentar ser empresario.
El papel del gobierno mexicano como empresario ha sido recurrentemente cuestionado debido a una larga historia de fracasos y pérdidas financieras. La idea de que el gobierno puede ser un buen empresario es una creencia que, como la mala hierba, nunca parece morir a pesar de los antecedentes.
Historia de fracasos empresariales
El gobierno mexicano ha intentado incursionar en diversos sectores empresariales, como el acero, la telefonía, los bancos, la televisión, los fertilizantes y el papel; sin embargo, la mayoría de estas empresas han terminado en ruina, con grandes pérdidas financieras que finalmente han sido cubiertas por los impuestos de los ciudadanos. Un ejemplo claro son las empresas PEMEX y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que año tras año sufren importantes pérdidas y están sumidas en deuda.
Recientemente, el gobierno anunció planes para crear una empresa de automóviles eléctricos, lo cual ha generado escepticismo dada la historia de fracasos en proyectos similares. El reciente intento de desarrollar la vacuna Patria después del inicio del Covid-19, que no ha generado resultados significativos, o los proyectos de avioncitos, aeropuertos, y trenecitos que no han tenido éxito, son ejemplos adicionales de esta tendencia.