En 2025, el proceso para obtener una visa americana sigue siendo un paso esencial para quienes desean viajar a Estados Unidos, ya sea por turismo, negocios, estudios o trabajo.
Las tarifas, establecidas por el Departamento de Estado de la Unión Americana varían según el tipo de visa que se solicite. A continuación, te presentamos los costos actualizados y cuál es la opción más económica este año.
¿Cuánto cuesta sacar la visa americana en 2025?
El costo de las visas de no inmigrante más comunes, como la B1/B2 (turismo y negocios), es de 160 dólares. Esta tarifa también aplica para estudiantes académicos (F), visitantes de intercambio (J), y periodistas (I), entre otros.
Por otro lado, las visas basadas en peticiones específicas, como las de trabajo temporal (H), trabajadores religiosos (R) o transferencias intraempresariales (L), tienen un costo mayor que oscila entre los 190 a los 205 dólares.
Para quienes buscan una visa K (prometido/a o esposo/a de un ciudadano estadounidense), el precio es de 265 dólares, mientras que las visas E (inversionistas o comerciantes bajo tratado) alcanzan los 205 dólares.
En cuanto a las visas de migrante, los costos también varían. Por ejemplo, las visas familiares procesadas bajo una petición I-130 tienen un costo de 535 dólares, mientras que las basadas en empleo cuestan 345 dólares.
¿Cuál es la visa americana más barata en 2025?
La opción más económica sigue siendo la visa para menores de 15 años, conocida como tarjeta de cruce de frontera, cuando al menos uno de los padres ya posee o está tramitando u documento similar. Este tipo tiene un costo simbólico de 15 dólares, lo que lo convierte en la alternativa más accesible del listado.
Requisitos para sacar la visa por primera vez
Para solicitar una visa americana por primera vez, es necesario cumplir con ciertos requisitos básicos:
- Completar el formulario DS-160 y pagar la tarifa correspondiente.
- Presentar un pasaporte vigente y una fotografía reciente con especificaciones oficiales.
- Agendar y asistir a una entrevista en la embajada o consulado correspondiente.
- Demostrar vínculos sólidos con el país de origen que aseguren el retorno tras el viaje.
