“Es una segunda oportunidad”: Estos son los dos tipos de cárceles en El Salvador
En El Salvador existen dos tipos de cárceles; para pandilleros, clasificados como “terroristas” y para quienes cometieron delitos menores; así es como funcionan
En El Salvador, el gobierno de Nayib Bukele emprendió una cruzada contra las pandillas, con el fin de mejorar la seguridad en el país centroamericano. Para ello creó el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), cárceles para pandilleros peligrosos como los de la Mara Slavatrucha.
En dichos lugares, los pandilleros enfrentan condenas de más de 100 años, por lo cual difícilmente alcanzarán la libertad. Sin embargo, no son los únicos centros carcelarios. Fuerza Informativa Azteca (FIA) visitó una cárcel para quienes cometieron delitos menores y reciben readaptación social.
El Salvador: El cambio que ha hecho Nayib Bukele en la seguridad
Presos en Santa Ana fabrican artículos
El gobierno de Nayib Bukele tiene la prisión de Santa Ana, donde los internos tienen labores como la fabricación de bancas para iglesias, así como libreros o uniformes, en espera de obtener su libertad.
Giovanni López cometió el delito de hurto, por el cual fue condenado a ocho años de prisión. Tras ser sentenciado, al estar recluido “se siente frustrante, porque es estar en otro mundo, no tiene nada que ver con la vida libre. Se siente que está uno perdido en muchas cosas”, declaró a FIA.
No obstante, López afirmó que tiene una segunda oportunidad al estar en la prisión de Santa Ana, donde todos los internos hacen alguna actividad beneficiosa para el Estado.
Entre las labores están fabricar literas para las Fuerzas Armadas de El Salvador, así como realizar revisiones mecánicas a los automóviles propiedad del gobierno.
Los habitantes de Las Delicias, Coatepeque, Santa Ana, ya cuentan con un espacio público de calidad para que puedan disfrutar del sano esparcimiento en un ambiente seguro. pic.twitter.com/q8MRD4KgyI
— Noticiero El Salvador 🇸🇻 (@NoticieroSLV) June 6, 2024
Prisión de Santa Ana cuenta con granja
La prisión de Santa Ana también cuenta con un huerto, el cual es cuidado por los reclusos. En dicho lugar cultivan frutas y verduras, así como colaboran en la cría de cerdos, vacas, patos, gallinas, conejos y hasta tilapias.
En dicha zona, la idea de rehabilitación es que los reclusos aprendan los oficios para reinsertarse en la sociedad. Guardias están observando a las personas, por medida de protocolo, aunque no significa que los presionan para trabajar.
La comida que es ingerida por los internos también es elaborada por ellos, y además de la misma forma se encargan de la preparación de pósteres y bebidas.