Carrera contrarreloj para encontrar al submarino que pretendía explorar los restos del Titanic

Al ser humano le encantan los desafíos. Y durante muchos años, llegar a los restos del Titanic fue uno de esos sueños. El barco hundido en 1912 ha desatado todo tipo de pasiones durante años. Y es de tan difícil acceso que fue hasta 1985 que lograron llegar, y es que no es para menos, está a 3 mil 800 metros de profundidad en medio del océano.

Pero el ser humano lo logró. Y no tardó mucho en sacarle provecho al hecho. Tanto así que actualmente hay una empresa que vende el paquete turístico. Ocho días en alta mar con la promesa de descender en un submarino hasta donde están los restos de esta mítica embarcación. Dicen que una vez que comienza a bajar el submarino, los ojos de los turistas no dan crédito de lo que ven. Se encuentran con todo tipo de criaturas marinas que jamás se imaginaron que existían.

Desde la superficie hasta los restos del Titanic son dos horas de descenso, pero parecen segundos ante la maravilla. La empresa OceanGate hace un viaje al año debido a las corrientes del agua y las condiciones climáticas. Cobran 250 mil dólares por persona. Y ese viaje salió el domingo. Todo marchaba de acuerdo a lo esperado, incluso comenzó el descenso sin contratiempos. Pero cuando llevaba una hora 45 minutos bajando, perdieron contacto y desde entonces nada se sabe ni del submarino, ni de la tripulación.

Viajaban tres turistas: un millonario británico y un paquistaní y su hijo. Por parte de la tripulación iban dos exploradores altamente capacitados. Uno de ellos incluso, ha realizado más de 30 viajes hasta los restos del Titanic. La guardia costera de Estados Unidos y de Canadá buscan desesperadamente una aguja en un pajar. Es una carrera contrarreloj, porque las estimaciones indican que tienen menos de 3 días de oxígeno disponible en el sumergible. La pregunta después de este incidente es: ¿seguirán existiendo este tipo de viajes?