Aunque poco se conoce sobre la forma de vida en el México prehispánico, algunos investigadores han podido interpretar de qué manera se vivían y explicaban los temblores en las diferentes culturas de nuestro país, un fenómeno que se ha presentado en la Tierra desde tiempos inmemorables.
De acuerdo con el escritor Rafael Tena, hoy en día la única información que se conoce acerca de los temblores en el México prehispánico proviene de los códices, libros que elaboraban las antiguas civilizaciones en las que ‘dibujaban’ los diferentes sucesos.
¿Cómo se pueden prevenir los temblores según los mexicas?
Pese a que las referencias son muy pocas, los estudios han revelado que los mexicas tenían una forma muy peculiar de ‘prevenir’ los desastres ocasionados por los temblores, según indica una redacción de Bernardino de Sahagún, misionero franciscano considerado el máximo investigador del México prehispánico, quien refiere que el actuar de esta cultura comenzaría con un poco de agua.
Bernardino de Sahagún exponía que, cuando la tierra temblaba, los mexicas rociaban con agua todas sus alhajas, tomando el líquido en la boca y vertiéndola sobre ellas; también salpicaban otros objetos como postes y umbrales de las puertas o casa, pues al hacer esto se encontrarían protegidos de todo desastre.
¿Cómo se vivían los temblores en el México prehispánico?
En aquel entonces el fenómeno se vivía muy diferente, ya que no existía una alerta sísmica capaz de anunciar a los habitantes que un temblor se encontraba cerca, ni mucho menos sofisticados aparatos que mostraban la magnitud de los sismos, aun así se las ingeniaban para que todos pudieran permanecer a salvo.
Al momento en que iniciaba a sentirse un sismo, la población era alertada por otros al comenzar a dar gritos y darse de golpes en la boca para que todos advirtiesen que temblaba la tierra.
El historiador sugiere que en aquel entonces el México prehispánico desconocía por completo que los sismos se daban como resultado el movimiento de las placas tectónicas y como explicación se pensaba que estos eran producidos porque el Sol y otros cuerpos celestes caminaban bajo la tierra conforme se hacía de día o de noche.