Alumnos de Tabasco denuncian presunto acoso por parte de maestros: “Necesitamos ayuda”

A Wendy nunca la escucharon y, después de tres años, decidió romper el silencio y denunciar por acoso sexual a uno de sus maestros del plantel uno del Colegio de Bachilleres de Tabasco (Cobatab).

“Nos acosan sexualmente. Nos dicen, no que tus piernas están muy bonitas o es que tú estás muy bonita; empezamos a reportarlo desde el año pasado, llevan generaciones reportándolo desde primer semestre, yo ya estoy en sexto semestre”, declaró una de las estudiantes afectadas.

“Llevamos días diciéndole desde el sábado de que no, que necesitamos que nos ayuden. Digamos que la directora y todos nos dijeron que, pues no”, explicó una de las afectadas.

Por ello, ese día, el 8 de marzo, salió a las calles de Villahermosa a marchar y, con una pancarta, denunció lo que ella y cientos de alumnas sufren a diario en su escuela, pues asegura que no es el único profesor que comete acoso.

“Ella se puso mal y a raíz de eso salió con todo y demandó, llevamos la demanda allá a la dirección general del Cobatab, no me hacían caso. Nadie sabe nada, las que están igual ahorita con el señor Evaristo igual, la secretaria ya aceptó que sí le dejamos los papeles, pero nunca hicieron caso”, agregó una de las testigos.

Wendy interpuso además una denuncia ante la Fiscalía del Estado y, ante el revuelo que causó, este lunes, ella y sus compañeros no se presentaron a clases y realizaron una manifestación dentro del plantel; la respuesta de las autoridades escolares no tardó en llegar.

“Nos amenazaron con que vendría la Guardia a retirarnos, no nos pueden callar, porque no se trata de vivir esforzándose; tratando de ser fuerte, de ignorar las miradas, se trata de poder caminar libres”, explicó una de las afectadas.

En un comunicado, la dirección del Colegio de Bachilleres aseguró que no tenían por presentada ninguna queja.

Esto enardeció a los alumnos inconformes, que exigían la destitución del profesor acusado.

Ante la falta de acuerdo con los directivos y la decisión que tomaron de suspender las clases de manera oficial el lunes, algunos lanzaron piedras y huevos hacia las instalaciones para mostrar su descontento.

Al final, llegaron elementos de la Policía Estatal, lo que obligó a los alumnos a dispersarse; el conflicto sigue latente.

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