Tender la cama | El Dictado de Carlos Guerrero
¿Los jugadores de equipos como Chivas y América han tendido la cama de su entrenador? ¿Por qué comienzan a ganar de la noche a la mañana?
Me cuesta trabajo aceptarlo porque no creo que un futbolista pueda atentar contra su propia trayectoria, a cambio de un mecanismo para desestabilizar el trabajo de su entrenador.
Sin embargo, cada vez son más los casos que cuadran con el hecho de que un vestidor puede más que cualquier 4-4-2.
Está claro que cuando un grupo de futbolistas no concuerda conciertas formas en la metodología de un director técnico, extrañamente a muchos de ellos se les pierde el instructivo de juego.
De la noche a la mañana, de una jornada a otra, la memoria se desmorona hasta el punto en donde ya no hay rasgos reconocibles en un campo de juego. Y no es tan complicado que esto suceda, pues basta con bajar la velocidad de los recorridos o disminuir la intensidad a la hora de disputar una pelota. Con eso es más que suficiente para ponerse en desventaja.
Algunos lo llaman “tender la cama”. Les cuento más en El Dictado.
