En febrero pasado, el entrenador de la NFL Brian Flores , actualmente con los Pittsbutgh Steelers, demandó a la NFL alegando prácticas racistas en los procesos de contratación de los equipos. Ahora, dos entrenadores más se han unido a las acusaciones.
Se trata de Steve Wilks, quien fue despedido después de una temporada como entrenador en jefe de los Arizona Cardinals, y Ray Horton, un veterano entrenador asistente y coordinador defensivo.
¿Cuáles son las alegaciones de Steve Wilks?
El primero de ellos, Wilks, señala que los Cardinals lo contrataron como un “entrenador provisional” en 2018, y que la franquicia no le dio la más mínima oportunidad de pelear por el puesto de manera permanente. Todo esto bajo la dirección del gerente general Steve Keim, quien permanece en el equipo.
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En aquella temporada, Arizona terminó con un récord de 3-13, aunque hay que señalar que Wilks fue despedido antes de que el club seleccionara en el draft a su actual quarterback y estrella, Kyler Murray. Fue en ese momento cuando Kliff Kingsbury, actual entrenador en jefe, fue contratado sin tener experiencia en la NFL.
“Al igual que Brian y Ray, no tomé la decisión de unirme a esta demanda en función de lo que podría costarme potencialmente en mi propia carrera, sino para marcar un precedente y ayudar en el futuro”, dijo Wilks en un comunicado.
¿Cuáles son las alegaciones de Ray Horton?
Por su parte, Horton aplicó para el puesto de entrenador en jefe de los Tennessee Titans para encarar la temporada en 2016, en donde ya fungía como coordinador defensivo.
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Sin embargo, denuncia que el equipo le dio una “entrevista falsa” para poder cumplir con la “Regla Rooney”, un requisito de la liga que los equipos consideran una lista diversa de candidatos para puestos vacantes de entrenador en jefe.
Ese año, los Titans subieron al puesto en disputa a Mike Mularkey, quien es de piel blanca. Mularkey dijo en una entrevista que la propietaria de los Titans, Amy Adams Strunk, y su familia, le dijeron que lo contratarían antes de entrevistar a los candidatos no blancos.
La NFL no se ha pronunciado al respecto de las nuevas demandas.