Una noche mágica se vivió en la Monumental Plaza de Toros México de la capital azteca. El sueño se hizo realidad y Rafael Nadal, uno de los mejores tenistas del planeta y de la historia, deleitó a la afición mexicana con su presencia en el Coso de Insurgentes en la que parece será su primera y única participación en la Ciudad de México.
Casper Ruud, el número 3 del mundo, fue el rival del actual número 2 del ranking y no decepcionaron. El balear jugaba en casa con la afición capitalina volcada a su favor -aunque también mostraban por momentos su apoyo al noruego- y terminó imponiéndose por parciales de 7-6 (9-7) y 6-4.
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Sin embargo, el resultado en la cancha adaptada sobre el ruedo de la plaza de toros más grande del planeta pasó a segundo término. Lo mejor fue el ambiente en los tendidos y la felicidad de Rafael Nadal jugando en México, a tal grado que a una recogepelotaas en especial, le dejó un recuerdo que jamás olvidará.
Rafael Nadal invita a una recogepelotas a jugar
El momento del encuentro y de este festival, sin duda, se dio cuando Casper Ruud le cedió su lugar en el campo a una pequeña recogepelotas para que jugara ante Rafael Nadal.
El gesto de ambos tenistas fue ovacionado por toda la Monumental y la niña cumplió el sueño de varios que se dieron cita en el recinto: Intercambiar algunos golpes con el máximo ganador de Grand Slams en la historia del tenis.
Con una sonrisa en el rostro, la pequeña le devolvió algunas bolas con la raqueta de Casper Ruud y el mallorquín le respondió con la misma sonrisa, en medio de aplausos de los aficionados.
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Finalmente, Rafael Nadal hizo vibrar a las casi de 40 mil almas que se dieron cita en la Plaza de Toros México en una noche que vivirá en el recuerdo como uno de los juegos con mayor asistencia en la historia del tenis.