Este fin de semana se consumará el último gran fracaso de Cruz Azul en la Liga MX. Un torneo más de decepción para su afición, que además tiene que aguantar de nueva cuenta el ser la burla de todos. Y esto no es más que el reflejo de lo que ha pasado y pasa hace tiempo en esta institución. El hazmerreír del furtbol mexicano repite constantemente su historia.
Antes todo era culpa de Guillermo Álvarez, también de su hermano Alfredo y hasta el cuñado Víctor Garcés. ¿Pero ahora? ¿Quién toma las decisiones en Cruz Azul?¿A quién se le pueden atribuir estos fracaso?
Te puede interesar: La Federación Mexicana lanza comunicado tras la convocatoria de Julián Quiñones a la Selección Mexicana
Partidazo entre América y Cruz Azul en el torneo Fut Azteca eCup
Los responsables del fracaso de Cruz Azul
Claro que el principal responsable es Víctor Velázquez, quien está a la cabeza del organigrama, pero igual se ha rodeado de gente que no tiene ni maldita idea de fútbol, o que no ve por los intereses reales de un equipo siempre abatido por los malos manejos.
Antes, además, se ponía al promotor Carlos Hurtado como el demonio que controlaba los hilos en el equipo cruzazulino. Hoy se habla del argentino Christian Bragarnik como el promotor que junto con Jaime Ordiales (quien por cierto es hermano de otro promotor, Mario), mueve lo que sucede con el equipo.
Y justo Bragarnik llevaría al siguiente técnico de Cruz Azul ahora que termine el torneo y que salga Joaquín Moreno de la institución (aunque este hombre siempre termina regresando). Y hay dos opciones: Jorge Almirón, quien recientemente perdió la final de la Copa Libertadores con Boca Juniors, o Diego Cocca. Ambos, claro, representados por el mencionado promotor argentino.
Y vaya que esto no tiene nada de extraño, ni es nada malo, pero confiar en los intereses del promotor en vez de hacer un verdadero proyecto deportivo tras un rotundo fracaso, es repetir la misma maldita historia de la institución.
En Cruz Azul no aprendieron lo sucedido con los Álvarez, o quizá solamente aprendieron lo que no ayuda a desarrollarse a la institución. Vuelven los manejos por el amiguismo, por un promotor de cabecera, por un cuñado incómodo, por gente que busca ganar en todo menos en la cancha.
No hay un trabajo en equipo a nivel directivo y comienzan a generarse divisiones en lo que comenzaron como alianzas. Hoy la gran pregunta es: ¿Qué va a pasar con Cruz Azul en el futuro inmediato?
Hoy realmente no se tienen ni idea de lo que sucederá, y no porque no haya información, sino porque vuelve a haber muchas cabezas tratando de mandar en un equipo que ha sido destrozado otra vez desde adentro, y quizá de esta si no se levante jamás.
Te puede interesar: “Es un fracaso total”: Erik Lira tras la eliminación oficial de Cruz Azul