Este sábado el peleador Oleksandr Usyk logró una hazaña en el boxeo profesional, cuando venció a Tyson Fury, para quitarle su corona de peso completo del CMB y convertirse en monarca indiscutido de peso completo.
Oleksandr Usyk, así se integra a la lista histórica de campeón de los 4 organismos, en la cual ya apareció cuando peleaba en la división de los cruceros.
Oleksandr Usyk, de 37 años, está destinado a ser considerado uno de los mejores pesos pesados en la historia, y posiblemente en el nuevo registro de mejores libra por libra de la actualidad, llegue a ser el mejor del mundo.
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Usyk, doble monarca indiscutido
Usyk, de 37 años, fue indiscutido en los cruceros el 21 de julio del 2018, cuando venció a Murat Gassiev, para quitarle los títulos de la Federación Internacional de Boxeo y Asociación Mundial de Boxeo.
Con esa hazaña, se incluyó por primera vez en la lista de peleadores campeones indiscutido en el pugilismo.
Al listado regresó este 18 de mayo, cuando derrotó al campeón del CMB, Tyson Fury al tener los de la FIB, OMB y AMB, volvió a ser un UNDISPUTED.
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La lista histórica de campeones indiscutidos
Bernard Hopkins - Peso mediano
Jermain Taylor - Peso mediano
Terence Crawford - Peso superligero y welter
Oleksandr Usyk- Peso crucero y *completo*
Josh Taylor- Peso superligero
Saúl Álvarez- Peso supermediano
Jermell Charlo: peso superwelter
Naoya Inoue- Peso gallo y supergallo
La crónica de la batalla de Usyk ante Fury
Oleksandr Usyk obtuvo una decisión dividida sobre Tyson Fury, para convertirse en campeón mundial indiscutible de boxeo de peso pesado, en una trepidante competencia en el Kingdom Arena en Riad.
El ucraniano de 37 años, es el primer boxeador en poseer los cuatro cinturones principales de peso pesado al mismo tiempo y el primer campeón indiscutible desde el final del reinado de Lennox Lewis en abril del 2000.
Usyk tuvo un buen comienzo, pero Fury aceleró en el cuarto asalto, destrozando a su oponente con intensos golpes al cuerpo.
La pelea volvió a inclinarse a favor del ucraniano y Fury se vio obligado a realizar una cuenta permanente en el noveno, cuando una ráfaga de golpes le cayeron por todos los puntos, estando no solo al borde de la derrota, si no del nocaut.
Fury logró aguantar hasta que sonó la campana, pero tuvo problemas durante los últimos tres asaltos de la pelea, esos round de campeonato que se apuntaron a Usyk, quien al final se llevó el indiscutido.
