Manchester City terminó de afinar su maquinaria para buscar su venganza ante el Real Madrid con una victoria sólida frente al Leeds United (2-1).
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Con su victoria ante el Leeds United, acumula 19 partidos oficiales sin derrotas con 16 victorias y 3 empates. Sólo el Nottingham Forest, el Leipzig y el Bayern Munich no han sido derrotados.
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Los empates como visitantes ante los equipos alemanes muestran una evidencia preocupante para el Real Madrid: el Manchester City, a diferencia de la temporada pasada, es capaz de renunciar a su estilo para convertirse en un equipo más conservador que después te acaba en el Etihad Stadium.
Durante todo el partido, pero especialmente durante los primeros 45 minutos, De Bruyne, Gündogan y Mahrez fueron una auténtica pesadilla para el equipo de Leeds. Entre los tres, generaron una cantidad de grietas enormes de las que se aprovechó Gündogan, que se anotó dos tantos con los que acabó con el duelo.
En el primero, a los veinte minutos, De Bruyne abrió el campo con un toque exquisito hacia la banda derecha, desde donde Mahrez fabricó un centro al borde del área que enganchó Gündogan con un derechazo inapelable. Y en el segundo, siete minutos después, de nuevo Mahrez asistió a Gündogan y el alemán, con su poderosa llegada, dejó el encuentro prácticamente sentenciado.
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El ciclón del City, probablemente muy inquietante para cualquier espectador madridista, sólo tuvo una “buena noticia” de cara a la ida de las semifinales: Erling Haaland mostró su cara menos voraz del curso. El delantero noruego falló lo que casi nunca suele fallar y se marchó frustrado del duelo.
Erling Haaland se va en blanco ante Leeds
Haaland olió el gol muy cerca, pero no llegó a tocarlo con los dedos y querrá resarcirse en el Bernabéu. Ni siquiera tiró el penalti que falló Gündogan en el tramo final con el que pudo cerrar su triplete y un partido que se complicó en los últimos cinco minutos con el tanto de Rodrigo tras un error de Manuel Akanji.
Durante un suspiro, el City sufrió. Se vino abajo cuando pudo estar en la cima. Algo parecido a lo que le pasó ante el Real Madrid la pasada temporada, cuando jugó mucho y bien, aunque la efectividad y la insistencia blanca pudo con ellos. Seguramente, Guardiola pasó del aplauso a la preocupación. Por errores de ese calibre, por deshincharse en un suspiro, la temporada pasada se quedó fuera de Champions. Y, el Real Madrid, no es el Leeds. El Real Madrid, te puede aniquilar.
El Manchester City quiere venganza y llegará al choque ante el Real Madrid en su mejor momento del curso.