El Guadalajara ya pulía sus vitrinas para colocar el trofeo de campeón. Ganaba el partido 2-0 tras 19 minutos de juego. Todo estaba en su favor, pero una reacción pulverizadora de la U de Nuevo León en la segunda mitad, que selló en tiempo extra, arrebató a las Chivas su campeonato número 13. Esto es lo que aprendimos del título de Tigres.
Gol de Guido Pizarro en la final de vuelta Chivas vs Tigres
Chivas se estacionó muy temprano
El Guadalajara lo ganaba 2-0 desde el minuto 19', pero cometió el grave error de estacionar el autobús con 45 minutos por delante, ante un equipo que en las finales se las sabe de todas, todas. Con un once de tanta experiencia y calidad como Tigres, como hombres tan peligrosos como Gignac, Quiñones o Córdova, echarse para atrás en una final es un sacrilegio, y Paunovic y sus pupilos lo pagaron caro.
Tigres buscó y buscó. Y se encontró con el primer gol quizá de la forma más fortuita: un penal producto de una mano dentro de área de Briseño. Pero estas cosas pasan cuando vas una y otra vez al ataque.
Ni así reaccionó el Rebaño, que minutos después permitió a Córdova rematar de cabeza por enésima vez en esta Liguilla para empatar el marcador. 2-2.
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Paunovic falló, pero hay poco que reclamarle
Antes de criticar los movimientos del técnico del Guadalajara en esta Final, hay que decir que ha sido lo mejor que le ha pasado al club en años. Sin embargo, se equivocó en la Final. Sus movimientos no enderezaron al equipo cuando más lo necesitaba.
No fue capaz de reanimar el juego colectivo y ataque de sus jugadores cuando Tigres estaba encima desde el inicio de la segunda mitad. Incluso tartamudeó con el cambio de Pável Pérez, a quien sacó del terreno de juego pocos minutos después de ingresarlo. Pauno se sintió inseguro y su equipo lo pagó. Pero no pasa nada. Es su primer torneo en México y seguro ha sido un aprendizaje para él también.
Tigres, un club que ya tiene un romance con el término “GANAR”
Gignac tuvo destellos, pero en el primer tiempo extra recalcó que ya no está en su mejor momento. Miguel Jiménez escupió al centro del área una pelota que quedó plena para el gol del francés que pudo definir la serie. Pero Gignac cometió una de las fallas más importantes que le hemos visto desde que llegó a México.
Empujó la pelota con la parte interna y Jiménez recostó para conseguir una atajada memorable. No hay que quitarle mérito al guardameta, pero Gignac no nos tiene acostumbrados a fallar esas pelotas.
Tigres ha sido una montaña rusa a lo largo del campeonato y el galo es el más claro ejemplo de ello. Los jugadores han mostrado niveles futbolísticos muy dispares en este semestre, y aún así llegaron a la Final y la ganaron. Esto habla de un equipo que ya está familiarizado con el término “ganar”. Es un estado de grandeza que no todas las instituciones pueden presumir.
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El futbol no premió al mejor trabajo del semestre
Nuevamente el futbol mexicano le dio la gloria al equipo que fue más jerárquico en la Final. Y por eso es un justo vencedor. Sin embargo, el Guadalajara hizo un trabajo dignísimo durante todo el campeonato.
Nunca fue considerado candidato al título y vino de menos a más. Con un plantel corto y conformado por puros mexicanos. Chivas es un equipo joven y con mucho futuro, que fue rebasado por un rival que tuvo el colmillo necesario para ganar este tipo de partidos. Pero si me preguntan cuál fue el equipo de marcó este torneo, ese es el Guadalajara.
