Este domingo Pumas recibirá a las Águilas del América para disputar la fecha 17 de la Liga BBVA MX en el Estadio Olímpico Universitario.
Y a lo largo de la historia, muchos jugadores emblemáticos de Pumas y América han portado ambas camisetas, tal es el caso de Nicolás Castillo, Hugo Sánchez y el Doctor Luis García entre otros. Estas llegadas o salidas de los clubes no siempre han sido bien vistas por la afición.
Un claro ejemplo es la historia de Raúl “El Bala” Salinas. El nacido en ciudad de México, inició su carrera en las fuerzas básicas de América, donde su talento lo llevo a debutar en la Primera División en el 2002 y estuvo en el equipo hasta el 2005 logrando dos títulos de liga con el cuadro de Coapa.
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Sin embargo, para el Clausura 2006, “El Bala” Salinas ya no entro en el plan de trabajo del entonces técnico americanista Víctor Manuel Aguado. Lo que llevo a que la directiva a pusiera a préstamo por seis meses.
Raúl Salinas tuvo tres opciones a elegir: Santos, San Luis o Pumas.
El defensor estudio sus opciones y eligió a los universitarios por ser un equipo de la capital, además Pumas estaba por disputar la Copa Libertadores, lo que representaba la cuarta copa en la carrera de Salinas.
Lo que nunca pensó el Raúl Salina fue que su llegada al equipo universitario se convertiría en un verdadero martirio.
“Saliendo de las instalaciones si hubo agresiones a mi persona, muy complicado, porque uno va a jugar futbol, aparte iban por mí en camionetas blindadas a mi casa, me llevaban al entrenamiento, luego entrenábamos en el campo cinco y me llevaban en la camioneta con tres personas de seguridad, cuando todos iban caminando”, aseguró.
Al ser de cuna americanista la afición auriazul nunca vio con buenos ojos su llegada a Ciudad Universitaria. El acoso y disgusto fue tan grado que durante un partido de pretemporada disputado en Avándaro ante Toluca, más de 60 aficionados lo agredieron cuando se subía al camión del equipo.
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Obligando al club universitario a ponerle seguridad privada que lo llevaran del entrenamiento a su casa todos los días por casi dos meses. Y en otras ocasiones tenía que abandonar el estadio en las cajuelas de los autos de sus compañeros.
Tras esa mala experiencia como universitario, Raúl Salinas regresó al América, en donde jugó por un año más y posteriormente militó en equipos como Necaxa y Veracruz. Actualmente El Bala” Salinas tiene una escuela de futbol en Tijuana.
