El Toluca, undécimo de la tabla, le pegó al líder Cruz Azul en los cuartos de final. En un duelo polémico, en donde el silbante Marco Antonio Ortiz Nava marcó dos penales en favor del cuadro local, uno de ellos más que polémico, los choriceros consiguieron la ventaja para volver a la capital con un tablero a favor por 2-1.
Juan Reynoso arriesgó con una alineación que pocos entendieron. Ni Jonathan Rodríguez, el hombre más importante en el ataque del equipo, ni Orbelín Pineda iniciaron el partido. Ambos entraron en la segunda mitad en lugar de Walter Montoya y Rafa Baca, respectivamente.
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El partido comenzó con Toluca en el ataque, sin temor de tener enfrente al líder del campeonato. Poco a poco la Máquina midió la calentura del infierno y se adaptó. Comenzó a atacar hasta nivelar el encuentro, y fue ahí cuando un error de Juan Escobar desencadenó el primer gol del Toluca. El jugador cometió una falta inocente dentro del área y Alexis Canelo no perdonó.
Pero la Máquina no bajó los brazos y niveló los cartones siete minutos después, con un golazo de Pol Fernández, quien en los linderos del área prendió con parte interna el esférico y lo incrustó pegado al segundo poste.
El partido era intenso, digno de una liguilla, y la parte complementaria arrancó de la misma manera, aunque el silbante no tardó en equivocarse, regalando un segundo gol a los choriceros. Rubens Sambueza se tiró dentro del área, sin aparente falta, y el juez le compró el penalti, que Michael Estrada no desaprovechó para el 2-1.
La Máquina, desesperada y golpeada anímicamente, tuvo para empatar con una gran jugada de Roberto Alvarado, quien se quitó a un defensa con un sombrero, y cedió a Angulo para que este simplemente firmara, pero abanicó.
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Reynoso quemó todas sus piezas
Cruz Azul lo intentó. Reynoso todavía metió a Santiago Giménez, el equipo estuvo encima. Y no concretó. En un contragolpe el Toluca tuvo para fulminar, pero un desvío milagroso de Jesús Corona evitó que el atacante escarlata anotara el tercero. Todo quedará para la vuelta en el Estadio Azteca, con Cruz Azul obligado a ganar.