Alemania. El polaco Robert Lewandowski sacó a relucir su liderazgo para dirigir al Bayern Munich hacia la victoria frente al Dortmund por 2-3, que sufrió el acierto del delantero polaco, autor de un doblete decisivo.
Presentación nueva imagen de la Selección Mexicana
El clásico de Alemania, el número 132 de la historia, invitaba a ver a dos de los mejores goleadores del mundo. Uno, Lewandowski, con ganas de demostrar que merecía el Balón de Oro. El otro, Erling Haaland, con hambre de minutos tras reaparecer frente al Wolfsburgo la pasada jornada después de superar una lesión en su cadera.
Te podría interesar: Fuerte cachetada recibe Xavi y Barcelona
A un solo punto de distancia, una victoria del Dortmund los colocaba en la primera plaza. Tenía que superar a un gigante y propuso un encuentro en el que brilló por su ausencia el centro del campo para lucimiento de los jugadores más veloces. El Bayern, sin Joshua Kimmich, sin querer, tuvo que jugar a ese juego. Pero, como Haaland en el Dortmund, también tenía arriba un cuarteto explosivo muy peligroso: Kingsley Coman, Leroy Sané, Thomas Müller y Lewandowski.
El Dortmund sacó rédito de su idea muy pronto. Exactamente, a los cuatro minutos, los que tardó en abrir el marcador por medio de Julian Brandt, que se fabricó el primer gol con un quiebre dentro del área que cerró con un derechazo que no puso salvar Manuel Neuer.
Poco después, Lewandowski, como casi siempre, no desaprovechó, Hummels quiso hacer un pase largo que rebotó en la espalda de Müller. El delantero del Bayern le ganó la posición en velocidad y Lewandowski, que acompañó en todo momento la jugada, recogió el balón para batir en un mano a mano a Kobel.
Luego de un partido de locura, de ida y vuelta, Coman apareció al filo del descanso en el minuto 44 gracias a un mal despeje de Raphael Guerreiro dentro del área que no desaprovechó con un derechazo que rebotó en Marco Reus.
Haaland no deja ser un alumno de lujo
Ya en la segunda parte, Haaland, que en el inicio del encuentro firmó una de sus cabalgadas que no acabó en gol por centímetros, no falló en su segunda oportunidad. Otro error, esta vez de Dayot Upamecano propició el tanto del noruego. Haaland no desperdició el regalo y con un disparo exquisita puso el 2-2 en el marcador.
Te podría interesar: Marchesín le manda un tremendo mensaje a Carlos Acevedo
Haaland no sólo empató el choque. Empató con Lewandowski en su duelo particular que después perdería. Y es que, tras su tanto, el partido perdió ritmo. Las interrupciones, obligadas por un golpe tremendo en la cabeza de Brandt y por la lesión de Lucas Hernández, frenaron el ímpetu del Dortmund.
Y, al final, la mala tarde de Hummels terminó de decantar el choque. De nuevo, cometió otro error. Esta vez, lo vio el VAR, que avisó al árbitro para pitar una mano muy clara dentro del área. Lewandowski no falló desde los once metros y dejó claro que todavía es el maestro y Haaland un alumno de lujo. Y, ya de paso, reafirmó en el liderato al Bayern, que saca cuatro puntos a su máximo rival al ritmo del Balón de Oro moral.
Con información de EFE